El impacto social de la muñeca Barbie como ejemplo a seguir para las niñas es algo con lo que hemos convivido desde su creación en 1959. Fue la primera muñeca de aspecto adulto que se comercializó a nivel mundial para el público infantil, y ha sido muy criticada por promover una imagen poco realista del cuerpo de la mujer.
Partiendo de la base del aspecto físico poco acertado de la muñeca, el artista digital Nickolay Lamm ha creado una réplica de Barbie pero con la imagen que luciría si tuviera las proporciones de una mujer real, haciendo una media de las medidas de la mujer que representa. ¿Qué os parece el cambio?
La polémica ha ido siempre de la mano de la muñeca Barbie desde que las niñas la tomaron como un role model en lugar de como un simple juguete. Sorprendentemente, y aunque se trata de un juguete para niños, la muñeca Barbie está inspirada en la sex doll alemana Bild Lilli, dirigida a un público adulto.
Gabriela nos habló hace tiempo en este artículo sobre el ejemplo nocivo de Barbie para la sociedad, promoviendo una imagen distorsionada del ideal de cuerpo femenino.
Si bien es nuestra responsabilidad educar a nuestros hijos, sobrinos o primos para que estén por encima de estos cánones de belleza irreales, regalarles una muñeca que los defiende de alguna manera puede que no sea la forma más acertada de formar su personalidad. Depende, está claro, de la educación que recibe cada persona: en el colegio todas mis amigas (y yo también) jugábamos con Barbies, y no las hemos tomado como modelo a seguir.
Mi pregunta es la siguiente: si comercializaran ahora la muñeca Barbie según la propuesta de Nockolay Lamm, ¿se seguiría vendiendo igual? Es más, ¿se convertiría, como la muñeca original, en un ejemplo a seguir para las niñas de hoy en día?.
Imagen y fuente | Nickolay Lamm En Vitónica | El nocivo ejemplo de Barbie para la sociedad
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