Para la población infantil, este comienzo de año puede significar una magnífica noticia en lo referente a su salud: el Consejo de Gobierno acaba de apoyar recientemente el Proyecto de Ley para la Promoción de una Vida Saludable y una Alimentación Equilibrada, que recoge una serie de medidas encaminadas a luchar contra los altísimos niveles de obesidad infantil. No obstante, Andalucía es una de las comunidades con mayor índice de sobrepeso y obesidad infantil de España y este proyecto fomentar unos hábitos de vida más saludables para la población.
Medidas que abarcan desde la obligatoriedad de servir agua gratis en restaurantes hasta la implantación de un mayor número de horas de educación física en los colegios, estamos ante la primera vez en que una Comunidad Autónoma legisla con el máximo rango normativo algo tan importante como es la política social en materia de lucha contra la obesidad. Fuera de España, Ámsterdam ya ha iniciado su particular lucha contra el sobrepeso y la obesidad con una serie de medidas.
Una Andalucía obesa
Según los datos de la Sociedad Española de Endocrinología Pediátrica (SEEP) publicados en su congreso estatal celebrado el pasado mes de Noviembre, un 35% de los menores de 18 años en Andalucía presentaban sobrepeso u obesidad, lo que significa que casi cuatro de cada diez niños en esta comunidad son obesos o con sobrepeso.
Los factores económicos pueden contribuir a favorecer el aumento de los niveles de sobrepeso y obesidad (y de hecho en muchas ocasiones se puede apreciar una fuerte correlación entre poder adquisitivo y obesidad)Estos son los datos recogidos en la EPA y publicados en el Diario Expansión en Andalucía:
Tasa de paro: la tasa de paro en la comunidad andaluza en el año 2016 estaba en torno al 25'4%, una puntuación superior a la media nacional, que era de un 18'5% (es decir, casi siete puntos superior a la media nacional).
PIB: si atendemos a los datos relativos al PIB per cápita, podemos observar que mientras en Andalucía éste si situaba en 17651 euros, la media en España era de 24100 euros (casi 7000 euros de diferencia).
Deuda pública: si comparamos los datos relativos a la deuda pública, podemos ver que la deuda pública andaluza en 2016 fue de 33325 millones de euros (un 22'4% de su PIB) y que la deuda per cápita era de 3963 euros por habitante, lo que la situaba en tercera posición en lo que a deuda por habitante se refiere.
Si unimos la alta tasa de paro, con un menor PIB por habitante y una de las mayores deuda per cápita por habitante, el resultado es un menor poder adquisitivo, y desgraciadamente ya hemos visto que los alimentos ultraprocesados y de baja calidad nutricional son más baratos que la llamada comida real. Evidentemente, todo esto contribuye a elevar los índices de sobrepeso y obesidad dentro de una comunidad.
Por último, no debemos olvidar que en los últimos años se está haciendo demasiado frecuente leer acerca del aumento de casos de niños que sufren enfermedades de "personas mayores" como la diabetes tipo 2, altos niveles de colesterol o hígado graso no alcohólico.
¿En qué consiste este proyecto?
Dentro del proyecto presentado para reducir los niveles de sobrepeso y obesidad, especialmente entre la población infantil, se han recogido diversas medidas que van encaminadas principalmente a la promoción de hábitos de vida saludables y la prevención de problemas como el sobrepeso, la obesidad y todas las enfermedades y dolencias que de ellos se derivan. El proyecto, presenta principalmente seis puntos básicos con los que pretende hacer frente a la terrible epidemia que representan los elevados índices de sobrepeso y obesidad dentro de la comunidad andaluza y del ámbito de la salud a nivel mundial en general.
Además, pese a que Andalucía es la primera comunidad autónoma que va a realizar este tipo de proyecto, otras comunidades ya están estudiando la posibilidad de implantar un proyecto de ley similar.
Adios a los refrescos "obesos" en las escuelas
Sin duda, el primer punto crítico en el que intervenir en la lucha contra la obesidad se encuentra en los colegios, donde al igual que ocurriera en Estados Unidos, en los últimos años han proliferado las máquinas de refrescos y vending de productos nada sanos para consumo de los más pequeños. Por ello, una de las principales medias que se ha querido incluir en este proyecto es la prohibición de los dulces y la retirada de aquellos refrescos que aporte más de 200 calorías.
Acceso público y gratuito al agua
El agua se presenta como un elemento indispensable dentro de las medidas clave de este proyecto ya que se pretende, entre otras cosas, que en aquellos centros educativos, lugares públicos y centros de ocio infantil en los que esté permitida la instalación de máquinas de refrescos, las empresas concesionarias tengan la obligación de ofrecer agua gratuita bien a través de la propia máquina o bien mediante la instalación de un surtidor a una distancia máxima de dos metros de la máquina de refrescos.
Así mismo, los bares y restaurantes deberán ofrecer agua de forma gratuita a sus clientes como alternativa a las bebidas disponibles en la carta del establecimiento (hasta ahora si se pedía una jarra de agua lo más normal es que nos la cobrasen aparte). Además, se pretende también regular la existencia de menús saludables en la oferta de los establecimientos y regular los tamaños de las porciones que se sirvan.
Actividad física en los colegios
Otra de las medidas estrella que quieren incluir en el proyecto es la de obligar a que en un plazo máximo de dos años desde la aprobación del proyecto, los colegios cuenten con un total de cinco horas lectivas semanales de educación física (como mínimo) para los alumnos como medida de promoción de una vida activa y mecanismo de lucha contra la obesidad infantil.
Atención integral a personas con sobrepeso y obesidad
Las medidas para luchar contra la obesidad para quienes aún no la sufran parecen estar claras pero, ¿qué ocurre con quienes presentan cuadros de sobrepeso, obesidad o trastornos alimentarios?
El futuro proyecto contempla medidas de atención integral para estas personas entre las que destacan el derecho a una atención sanitaria continuada, el derecho al respeto de su dignidad personal o la no discriminación por su condición (uno de los efectos que provocan el sobrepeso y la obesidad es que entre quienes lo sufren la tasa de paro sea más alta que entre quienes presentan un peso dentro de lo normal).
En lo referente a la formación se prevén dos medidas igualmente de importantes: por un lado, la formación del profesorado en materias de hábitos saludables como la alimentación equilibrada y la actividad física en centros de educación infantil y secundaria o la configuración de ofertas docentes para las universidades andaluzas en temas como la promoción de la dieta mediterránea o la promoción del ejercicio físico orientado a la pérdida de peso y la prevención del sobrepreso y la obesidad.
Promoción del transporte ecológico: parkings para bicicletas
Otra de las medidas encaminadas a la lucha contra los niveles de sobrepeso y obesidad (pero en este caso dirigida al público adulto) sería la instalación o adecuación de parkings para bicicletas en aquellas empresas que cuenten con más de 50 empleados. Con esto, se pretende matar dos pájaros de un solo tiro, ya que por un lado se lucha contra la obesidad mediante la promoción de un hábito tan saludable como es el desplazamiento en bicicleta y, por otro lado, se lucha contra la contaminación y se promueve un medio de transporte totalmente ecológico.
Información y publicidad
Uno de los primero puntos recogidos referentes a la información al ciudadano es la creación de una base da datos que estará disponible en la web de la Consejería de Salud, en la que los consumidores podrán consultar la información nutricional de los productos que consumen. A esto se le una la creación de un sello o distintivo para aquellas empresas que se comprometan a promover unos hábitos de vida saludables así como la instauración del Premio a la Innovación y a las Buenas Prácticas en materia de actividad física y alimentación saludable para aquellas empresa u organismos que asuman el compromiso de luchar contra el sobrepeso y la obesidad.
Por último, otra de las medidas será la limitación de la publicidad de alimentos y bebidas no alcohólicas a los menores de quince años en un intento por reducir el consumo de productos de alto contenido calórico y escaso aporte nutricional. A esta medida se le sumará la obligatoriedad de etiquetar, en los institutos de educación secundaria, la cantidad de calorías netas por porción envasada de los productos que se ofrezcan tanto en sus máquinas de vending como en sus cafeterías en caso de tenerlas.
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