Los yogures probióticos son anunciados de una manera especial, como si fueran capaces de ofrecer mayores beneficios a nuestro organismo que los yogures normales. La realidad es que un yogur normal y uno probiótico son prácticamente iguales con respecto a los beneficios que nos aporta, sólo presentan una ligera diferencia poco significativa.
Para demostrar las diferencias entre ambos productos, un grupo de científicos vieneses realizó un estudio donde quedó plasmado el efecto de cada yogur. Formaron dos grupos de mujeres, a 17 de ellas se les administraron diariamente 100 gramos de yogur probiótico, el segundo grupo formado por 16 mujeres tomaron yogur normal. Transcurridos 14 días se aumentó la cantidad de yogur a 200 gramos, cantidad que fue ingerida diariamente durante otras dos semanas.
El siguiente paso fue recabar toda la información relacionada con el sistema inmunológico, la capacidad defensiva, las sustancias que actúan como mensajeras en dicho sistema, etc. Los resultados eran sorprendentes, la actividad celular defensiva aumentó en un 100% en ambos casos, no encontrando más que una sola diferencia, los efectos de los yogures probióticos duran un poco más.
Para quien toma diariamente yogures, da igual si son probióticos o normales, de hecho, lo que sí afirman los científicos que han elaborado este estudio, es que es muy importante incluir este alimento en nuestra dieta diaria por todos los beneficios que aportan a nuestro organismo.
Vía | DW World Más información | Sueddeutsche