Cinco alimentos que a primera vista parecen veganos, pero en los que conviene revisar la etiqueta para asegurarnos

Si has decidido llevar una alimentación 100% de origen vegetal, debes saber que es necesario leer con atención el listado de ingredientes de los productos y conocer su procedencia, pues hay muchos alimentos que creemos veganos pero pueden no serlo como los que te mostramos a continuación:

Alimentos y productos que pueden no ser veganos

Para llevar una alimentación vegana al 100%, recomendamos siempre conocer la procedencia y los ingredientes de lo que incluyes en tu mesa, pues muchos productos, preparaciones o alimentos pueden ser engañosos. Algunos ejemplos incluyen:

Pan

Aunque lo básico es que incluya harina, agua, sal y levadura, muchos incorporan huevos, mantequilla o leche, siendo en estos últimos casos una opción no apta para dietas veganas.

Patatas fritas de bolsa

Son una de las opciones que pueden ser veganas y resultan poco sanas por lo que recomendamos evitarlas al máximo. Pero además, este ultraprocesado puede incluir entre sus ingredientes grasa de cerdo o vacuna que se utiliza para la fritura dando un sabor ahumado al producto final.

Cervezas y vino

En muchos casos, durante la fabricación de estas bebidas alcohólicas, se utiliza el llamado cola de pescado que se obtiene de la vejiga de algunos peces como el esturión o la carpa y se emplea como clarificador del producto. Si bien hay, cada vez más opciones 100% veganas, muchas otras continúan usando este producto animal que impide que determinados vinos y cervezas sean aptas para una dieta a base de alimentos vegetales.

Gelatina y derivados

La gelatina puede ser vegana, pero en muchas ocasiones deriva del tejido conectivo de los animales. Por ello, muchos otros productos como algunas jaleas, gominolas, cereales, suplementos, yogures o caramelos tampoco son aptos para veganos debido a que incluyen este derivado animal como gelificante. También puede presentarse con el nombre de grenetina.

Bebidas o dulces color rojo

En productos de color rojo muchas veces se utiliza el aditivo E-120 que no es más que un colorante derivado de las cochinillas, un pequeño insecto que no permite que estos productos sean de origen vegetal en su totalidad.

Estos son algunos ejemplos de que aunque creamos, muchos productos o alimentos pueden no ser veganos como creíamos. Por lo tanto, siempre es recomendable indagar su procedencia o analizar el listado de ingredientes presente en su envase.

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