Las palomitas de maíz son un alimento muy saludable, rico en hidratos de carbono, fibra e incluso con un buen aporte de antioxidantes. El problema es que solemos asociar las palomitas con gran cantidad de grasa, algo que no es del todo cierto, sobre todo dependiendo de cómo esten preparadas las palomitas. ¿Cuál es la mejor forma entonces de comer palomitas?
Las palomitas que solemos encontrarnos en el cine son muy ricas en grasas y sal, sobre todo las de mantequilla o sabores. Con las palomitas de microondas suele ocurrir algo parecido, son granos de maíz tratados con grasas y aceites que les dan sabor y esto conlleva más grasa y sal.
Sin duda las mejoras palomitas que podemos comernos son las palomitas caseras, las hechas por nosotros mismos, que vamos a controlar la cantidad de aceite y sal que tienen. Como ejemplo, para unos 25 gramos de palomitas echaremos un par de cucharadas de aceite, el truco está en que no haya mucho aceite sobrante para que cuando salten no se empapen y se vuelvan grasas.
Esta es la diferencia entre comernos unas palomitas grasas y calóricas que están procesadas (hasta 500 kcal por 100 gramos) a comernos unas palomitas más ligeras y digestivas (apenas 200 kcal por 100 gramos). Por supuesto la mejor forma también de comer palomitas es no pasándonos con ellas, con un cuenco mediano que equivale a una ración es suficiente para matar el gusanillo y disfrutar de este polivalente alimento que no es otra cosa que maíz.
En Vitónica | Palomitas de maíz, un aperitivo muy nutritivo En Vitónica | Palomitas de maíz, fuente insospechada de antioxidantes Imágen | hdaniel