Que los vegetales son buenos para la salud todos lo sabemos, y por ello deben estar presentes en nuestra dieta diaria. Un vegetal que muchas personas consumen debido a sus beneficios y ayuda a la hora de mantener un cuerpo en perfectas condiciones son los espárragos. En el mercado podemos encontrar dos variedades de espárragos, los verdes y los blancos. Por ello en esta ocasión queremos comparar ambos tipos y saber cuál de los dos es mejor para nuestra salud.
Los espárragos son un vegetal muy indicado en dietas de adelgazamiento y de control de peso, ya que contienen altas cantidades de agua y muy pocas calorías, además de tener mucha fibra y ser un alimento altamente diurético. Pero seguro que muchas veces hemos dudado de la efectividad que tiene un tipo u otro de espárragos. Ambos tipos, los blancos y los verdes, tienen la misma manera de actuar en el organismo, aunque sí que es cierto que tienen algunas diferencias nutricionales que vamos a repasar.
Diferencias en la recogida
En primer lugar debemos tener clara la diferencia que existe entre ambos, y es que el proceso de recogida de ese alimentos es el detonante de estas variaciones y diferencias. Los espárragos blancos se recogen cuando el espárrago no ha salido a la luz, es decir, se trata de la raíz de esta planta. De ahí su color blanco, ya que no le ha dado la luz del sol y se mantiene tierno. En cambio los espárragos verdes no son la raíz, sino la planta germinada y a la cual le ha dado la luz del sol que da en ella el color verde que posee.
La diferencia entre ambos tipos de espárragos estriba en esta exposición al sol que el espárrago triguero o verde tiene, frente al blanco que no tiene. Precisamente esta exposición al sol es la que le dota de más nutrientes beneficiosos para el organismo, mientras que el resto de propiedades las sigue conservando. Este hecho hace que los espárragos trigueros sean mucho más valorados nutricionalmente hablando que el blanco.
Diferencias nutricionales
El espárrago triguero nos aportará grandes cantidades de minerales entre los que cabe destacar el potasio, el calcio, el fósforo y el magnesio, necesarios para un correcto funcionamiento del organismo. Las vitaminas son otra parte importante de los nutrientes que nos brindan esta clase de espárragos. Entre ellas vamos a destacar las vitaminas del grupo B, el ácido fólico, la vitamina C, la vitamina A y la E. A pesar de esto, el espárrago triguero nos ofrece menos cantidad de proteínas y de azúcares que el blanco.
Un punto a tener en cuenta de ambos tipos de espárragos es que ambos contienen altas cantidades de una sustancia conocida como ácido aspargínico, que es el encargado de la diuresis que se produce en el organismo al consumir este tipo de alimento. Por ello el espárrago en ambas versiones es un alimento muy bueno para mantener una salud correcta.
Imagen | Nacho Vegas