Batata vs. patata, la batalla nutricional

Empecemos aclarando una duda que a mí también me intrigaba hasta hace poco: boniatos y batatas son lo mismo, un alimento de origen americano que Colón trajo a España tras sus expediciones y que arraigó en todos aquellos territorios donde su cultivo es posible. Actualmente la mayor producción de Europa se encuentra en la provincia de Málaga.

Y aun así, hasta hace pocos años no todo el mundo conocía o había comido boniato alguna vez. Esto ha cambiado recientemente porque en el mundo de los platos fotografiables para Instagram y los superalimentos, este es uno de los alimentos más recomendados y populares.

Pero, más allá de una sola letra en su nombre, ¿qué diferencia a la patata de la batata? ¿Es más saludable uno que otro? Vamos a analizarlo.

Diferencias nutricionales entre la batata y la patata

Es absurdo establecer con precisión milimétrica los valores nutricionales de un alimento porque siempre habrá variaciones teniendo en cuenta la variedad, la porción y la forma de cocinado. Para hacer a cabo esta comparativa vamos a seguir los pasos de este artículo de Cleveland Clinic, que calcula esos valores partiendo de una patata y una batata de tamaño medio asadas, incluida la piel y sin condimentos añadidos.

Según sus cálculos, la patata tiene un mayor aporte calórico (130 calorías frente a 90), algo más de carbohidratos (29 frente a 24 gramos) y menos azúcar (2 gramos frente a 7). El aporte proteico es similar (3 y 4 gramos respectivamente) y el de fibra es el mismo (2 gramos en ambos casos).

Ambos alimentos tienen un aporte similar de vitamina C y B6, pero son diferentes en cuanto a la vitamina A: la batata tiene casi el doble que la patata. En cuanto a los minerales, la patata nos aporta potasio, magnesio y algo de hierro, mientras que el boniato tiene algo menos de potasio, más o menos el mismo magnesio pero un aporte importante de calcio.

La vitamina A es la principal diferencia

Como podemos observar, ambos alimentos tienen ligeras diferencias, pero quizá la más importante esté en la vitamina A, de la que el boniato tiene más o menos el doble (22 Unidades Internacionales frente a 14 que tiene la patata). La vitamina A o betacaroteno se encuentra también en otros alimentos de color amarillo, naranja o rojo, como las zanahorias.

La importancia radica en que en muchos lugares del mundo la vitamina A escasea, lo que produce problemas de salud sobretodo relacionados con la visión. En algunos países, los niños corren riesgo de padecer ceguera debido a la falta de vitamina A. En algunos de esos países se prima el cultivo de boniato sobre el de patata precisamente para suplir esas carencias.

Por lo demás, importa más cómo las cocines

En otros aspectos, la batata o la patata no presentan unas diferencias nutricionales suficientes como para primar una sobre la otra. Es cierto que el contenido en azúcares de la batata es superior, pero este tipo de azúcares llamados intrínsecos (en contraposición con los azúcares añadidos) no suponen un riesgo para la salud, sino todo lo contrario. Si quieres ampliar la información sobre este tema, te recomiendo este artículo del nutricionista Julio Basulto.

De hecho, si lo que nos preocupa es la salud, más importante que la elección entre batata o patata es el modo que elijamos para cocinarlas porque el aporte calórico no será lo mismo si las comemos cocidas o asadas que si las comemos fritas, engrasadas con mantequilla o con queso fundido y bacon, por ejemplo (aquí os ordenamos de más saludable a menos todas las formas de preparar patatas, pero podéis aplicarlas también a los boniatos).

De forma que si estás dudando entre patatas o batatas, deja de dudar: ambas tienen lugar en una dieta saludable y no tienes por qué quedarte solo con una. Eso sí, cocínalas de manera que sigan siendo saludables, asando o cociendo mejor que friendo y controlando los condimentos con los que las acompañas.

Imágenes | Unsplash
En Vitónica | Todas las formas de cocinar las patatas, ordenadas de mejor a peor para tu salud