¡Mueve esas caderas!

Uno de los problemas más importantes a nivel físico con los que se encuentra el sector femenino de todas las edades es la acumulación de grasa en las caderas. La acumulación en esa zona llega a transformar su figura creando complejos que desembocan en una busqueda de soluciones rápidas: las operaciones de cirugia.

En Vitónica os mostramos una serie de ejercicios que os ayudarán a manteneros en forma y moldear vuestro físico de una manera natural y divertida.

Un vistazo a…
AYUNO INTERMITENTE

Para empezar, es necesario como en toda actividad física, realizar cierta carga de trabajo aeróbico para calentar el cuerpo y prepararlo para un trabajo localizado y específico.

Correr, andar, montar en bicicleta todo vale para quemar grasas y calentar antes de entrar en materia.

Cuando estamos listos, 15 minutos serán suficientes, comenzamos con el trabajo localizado, con el cuerpo extendido en el suelo y volcados sobre el lado derecho, extendemos el brazo y apoyamos la cabeza en la superficie en la que nos encontremos. Mientras, con la pierna derecha doblada y formando un ángulo de 90 con el pecho, flexionamos la pierna izquierda hacia fuera a 90 grados y en línea con el tronco. La palma de la mano izquierda se apoya delante del pecho

Una vez en esta posición, comenzamos con las piernas juntas y levantamos la pierna derecha hasta la altura de la cadera, trabajando el músculo.

Para trabajar el interior de los músculos, cambiamos la posición y en decúbito supino, con los brazos en los costados levantamos la pierna dobladas formando un ángulo de 90 grados entre el tronco y los muslos. Una vez en esta posición abrimos y cerramos las piernas asegurándonos que la espalda está siempre apoyada en el suelo.

Por último, con el cuerpo extendido sobre el lado izquierdo, el brazo extendido y la cabeza apoyada, doblamos la pierna derecha hacia el pecho y extendemos la izquierda hacia fuera. Para aumentar la superficie de apoyo extendemos la mano derecha delante del pecho.

Una vez colocados, levantamos un poco la pierna derecha hasta la altura de la cadera y bajamos lentamente. Tenemos que evitar mover la cadera hacia delante para que no sufra la espalda.

Recordad también que después de cada ejercicio hay que estirar correctamente para prevenir lesiones que lastren nuestros avances.

Portada de Vitónica