En anteriores ocasiones os hablamos ya del mindfulness y de cómo la ciencia efectivamente respalda algunos de los beneficios que nos promete obtener (aunque no todos ellos). Podríamos decir que el mindfulness es, con sus más y sus menos, el concepto actual de meditación: un medio para encontrarnos presentes y para deshacernos del estrés y la ansiedad que nos rodea cada día.
En esta ocasión nos centraremos en los beneficios que la práctica del mindfulness o meditación puede tener sobre nosotros como deportistas: ¿realmente puede ayudarnos a rendir más y a obtener mejores resultados en nuestro deporte?
La meditación ha tenido relación desde sus inicios con diferentes religiones, como por ejemplo el budismo. Hoy, esta meditación se aleja del plano religioso y se acerca más a ese plano mundano, utilizando esta práctica que promueve la concentración en el momento presente para conseguir mejores resultados en todo lo relacionado con nuestro día a día: deporte, trabajo e incluso relaciones familiares o sociales.
En el caso del deporte, el mindfulness o la meditación se ha demostrado eficaz (según un estudio publicado en The sport journal) a la hora de motivar a los deportistas para entrenar de una manera más regular y a encontrarse más satisfechos con los resultados de sus entrenamientos.
En ocasiones se ha llegado a equiparar la importancia del entrenamiento mental con el entrenamiento físico en el caso de los atletas, y es que el poder de la concentración y de la visualización puede ayudarnos a mejorar nuestros resultados deportivos.
La importancia de la visualización a la hora de conseguir tus objetivos
La visualización es una parte importante de la psicología deportiva, tanto en entrenamientos como, sobre todo, en competiciones. Ya en 1999, una revisión de estudios llamada Imagery use in sport: A literature review and applied model, incidía en la importancia de la visualización de los atletas antes y durante las competiciones como un método para aprender nuevos movimientos y para mejorar sus resultados deportivos.
Ser capaces de visualizar en nuestra mente aquello que vamos a hacer durante el entrenamiento o la competición, antes de que esta tenga lugar, activa una zona concreta de nuestro cerebro y nos ayuda a crear conexiones neuronales y a establecer los caminos que seguiremos cuando tengamos que pasar a la acción.
Evidentemente, esto no quiere decir que con solo pensarlo podemos hacerlo: el entrenamiento físico es imprescindible. Pero visualizarnos a nosotros mismos consiguiendo nuestro objetivo y repasar mentalmente cada fase de este (ya ea un movimiento de gimnasia o cómo será nuestro desempeño a la hora de correr una maratón) puede predisponernos a conseguirlo de una manera más sencilla.
Por otro lado, la visualización, el mindfulness (estar concentrados en el momento presente) y la meditación en general, también pueden ayudarnos a calmar los nervios pre-competición o pre-entrenamiento y, de esta manera, concentrarnos en aquello que vamos a hacer y ayudarnos a conseguirlo.
Cómo la visualización me ayudó en mi primera maratón
Personalmente, utilicé el método de visualización el año pasado cuando me enfrenté a mi primera maratón: una prueba para la que había entrenado mucho físicamente, pero que cuenta también con un importante componente mental.
A la hora de aplicar la visualización en carrera, es útil conocer el recorrido de la misma de antemano y establecer una adecuada estrategia de carrera que nos ayude a saber cuándo tendremos que apretar el ritmo y cuándo podremos relajarnos.
Visualizarnos a nosotros mismos, no solo entrando en meta, sino recorriendo cada una de las calles por las que va a transcurrir la carrera nos ayudará a estar más relajados y a controlar los nervios en el "día D", y también a crear asociaciones positivas en nuestro cerebro.
Durante los entrenamientos de la maratón, algo que es imprescindible trabajar de cara a evitar posibles lesiones y a mejorar nuestro rendimiento es la técnica de carrera. Visualizarnos a nosotros mismos dando zancadas amplias, manteniendo una buena postura, aterrizando con el antepié y manteniendo una buena alineación nos hará mucho más fácil el hecho de mejorar nuestra forma de correr.
Si vas a correr una maratón dentro de poco (la maratón de Sevilla el fin de semana que viene, por ejemplo) estás a tiempo de analizar el recorrido e ir visualizando cómo van a ser esos kilómetros: cómo va a ser tu estrategia de carrera y cómo vas a moverte en cada fase de la misma. La visualización y la concentración previas te ayudarán a cruzar la meta.
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