Elegir el calzado adecuado cuando salimos a correr no siempre es tarea fácil: debemos tener en cuenta diferentes aspectos como nuestra técnica de carrera, nuestro peso, nuestro ritmo, el terreno sobre el que correremos... Aun conociendo todos estos datos, dar con las zapatillas correctas se hace difícil y la mayoría de runners no aciertan a la primera.
La inmensa mayoría de los corredores hoy en día optan por las zapatillas con amortiguación: este tipo de calzado nos provee de protección cuando nuestra técnica de carrera no es la óptima y ayuda a proteger nuestras articulaciones. Actúa, eso sí, como un parche temporal.
Sin embargo, algunos corredores optan por el calzado minimalista: las zapatillas sin amortiguación e incluso las sandalias. En ambos casos calzado hablamos de calzado sin amortiguación que favorece una pisada más natural y un mayor contacto con el pavimento, ofreciéndonos más información sobre nuestra carrera.
Hemos hablado con Pedro, Santacenero en las redes sociales, runner minimalista, maratoniano y caricaturista para saber qué se siente al correr con sandalias. Esto es lo que nos ha contado.
¿Cómo comenzaste en el mundo del minimalismo? ¿Te animó algún amigo? ¿Fue porque lo viste en alguna carrera?
Descubrí el mundo del minimalismo a raiz de la lectura del libro Nacidos para correr. En él hablaban de una tribu mejicana llamada “Tarahumaras” que recorrían grandes distancias con huaraches. Todo lo que el libro contaba me sonó muy bien, veía que todo tenía sentido, así que decidí probarlo. Además, estaba en una época en la que me encontraba un poco estancado y casi aburrido de correr. No progresaba y eso me desmotivaba. Así que el cambio al minimalismo supuso una nueva motivación.
Antes corrías (y en ocasiones sigues corriendo) con zapatillas en lugar de sandalias, ¿cómo es el período de adaptación para pasar de un tipo de calzado a otro?
Antes corría con zapatillas normales, amortiguadas. Desde entonces ya no he vuelto a usarlas. De hecho, creo que si corriera ahora con ellas me lesionaría. Cuando te has acostumbrado a correr con la amortiguación propia de tus pies, al volver a usar zapatillas acolchadas las notas inestables, y notas que no pisas bien.
Mi fase de adaptación duró algo más de un año, aunque realmente no se puede decir nunca que ya estás completamente adaptado al 100%. Empecé corriendo con unas zapatillas de transición con cero drop, es decir sin tacón. Esto ya me permitía entrar de antepie sin necesidad de forzar mucho el gesto. Poco a poco me fui intruduciendo en otro calzado más minimalista, como las sandalias, Five Fingers, zapatillas minimalistas más específicas, e incluso correr descalzo.
¿Cómo describirías las sensaciones al correr con sandalias? ¿Es muy distinto a la carrera con zapatillas?
Correr con con zapatillas amortiguadas y minimalista es como tocar una guitarra con guantes y sin guantes. Las sensaciones son totalmente distintas. Puedes sentir el terreno que pisas, la textura. Empezar a aterrizar de manera más suave porque tus pies “ven” lo que pisas. No tienen las “interferencias” que una zapatilla amortiguada les provoca.
Entre correr con zapatillas amortiguadas y sandalias hay mucha diferencia de sensaciones. Pero también las hay entre correr con sandalias y descalzo, aunque no lo parezca. Y sobretodo, correr de manera minimalista o descalcista te aporta otra cosa muy importante: correr se hace mucho más divertido.
¿Qué te aportan las sandalias a la hora de correr que no te pueden aportar las zapatillas?
Las zapatillas “normales” realmente no aportan mucho. Modifican tu pisada. Hace que puedas pisar de formas que descalzo no podrías, como entrar de talón. Creo que las zapatillas mientras más tecnología tengan, peores para tus pies serán.
¿Has introducido un trabajo de fuerza específico para la musculatura del pie?
El hecho de correr de manera minimalista ya hace que el pie, el tobillo y las piernas se vayan fortaleciendo poco a poco. No hace falta hacer un trabajo extra. Lo que está claro es que la transición al minimalismo deber ser suave, de lo contrario te lesionarás con toda seguridad. No puedes de un día para otro correr con sandalias como corrías con amortiguadas (ritmo, distancias, etcétera). Sería como ir de repente al gimnasio e intentar levantar 100 kg. Esa perspectiva es lo que hace pensar a mucha gente que correr descalzo/minimalista es perjudicial. Es imprescindible hacer una transición. Debes reaprender a correr, empezar de cero.
¿Has sufrido alguna lesión debido al cambio de calzado por las sandalias o, al contrario, crees que este cambio te ha servido para esquivar algunas lesiones frecuentes en corredores?
Nada grave. Pequeñas molestias típicas al inicio de la transición, pero nunca me dejaron parado más de dos semanas. Como he comentado antes, correr así te hace tener unos pies, tobillos y piernas más fuertes y eso siempre ayuda a correr. Por ello, ese fortalecimiento seguro que me ha evitado caer en lesiones que normalmente todos los corredores tienen. Nunca he ido al fisio, con eso lo digo todo.
¿Crees que el uso de calzado minimalista ha colaborado a la hora de mejorar tus tiempos y de hacerte un mejor corredor?
Totalmente. Me ha ayudado para mejorar mi economía de carrera y eficiencia. También fueron muy importantes cambios en hábitos de alimentación e introducción de ejercicios de fuerza en mis entrenamientos diarios. Todo ello ha desembocado en una pérdida de peso, que eso es la clave para mejorar tiempos.
¡Muchas gracias, Pedro, por compartir con nosotros tu experiencia! ¡Esperamos que sigas recorriendo muchos kilómetros a golpe de sandalia!
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