El desgaste físico realizado durante un partido o competición es, obviamente, mucho mayor al producido en la mayoría de entrenamientos habituales. Será por ello no menos importante que la propia preparación para la misma, realizar una correcta recuperación tanto a nivel de descanso como de alimentación para regenerar nuestros depósitos de energía.
Si tu deporte es de fondo y has hecho un gran esfuerzo (tipo marathón o salida en bicicleta de varias horas) sabrás que en ese momento tus reservas de glucógeno serán mínimas por lo que necesitarás una recarga de hidratos de carbono de calidad.
Será muy importante tomar bebidas isotónicas y con distintos azúcares los primeros minutos después de la competición o prueba. La rápida asimilación de las bebidas te evitará caer en los típicos "bajones".
Las siguientes comidas deberán ser muy parecidas a las de precompetición, tomando al menos unas 200 kcal. en hidratos de carbono de lenta asimilación. Además, deberemos suplementarnos con un complejo vitamínico completo, así como con aminoácidos ramificados para evitar el catabolismo muscular e incluso reforzarlo con otros recuperadores como el Malato de Citrulina, que nos ayudan a eliminar las sustancias de desecho generadas por el esfuerzo muscular.