En ésta época del año florecen las dietas milagros que nos atraen con sus sorprendentes ofertas para bajar de peso rápido y llegar en forma al verano. Por eso, para que no dejemos que nada ni nadie perjudique nuestra salud mediante un engaño, realizamos otro análisis de dietas milagro, colocando bajo la lupa a la dieta de la avena.
¿En qué consiste la dieta de la avena?
Tomando un alimento sano como es la avena, al dieta propone basar durante 5 días la alimentación en una preparación a base de avena en la cual 3 cucharadas de este cereal se hidrata en una taza de agua o leche desnatada. Además, se incluyen en la dieta frutas frescas, verduras, yogur desnatado, queso fresco o requesón desnatado pero no se permite el consumo de pastas, azúcares, alcohol, ni carnes.
La dieta dura 5 días y se debe descansar un mínimo de dos días si se quiere continuar 5 días más. Es una dieta de muy bajo valor calórico que promete una reducción de cerca de 1 kilo por día.
Ofrece grasas saludables porque permite la ingesta de aceite de oliva y nueces, pero es muy pobre en hierro, en proteínas cárnicas y excepto la avena, no permite la ingesta de cereales.
Errores de la dieta de la avena
La dieta de la avena es muy restrictiva, muy pobre en calorías y al no presentar casi hidratos de carbono complejos, permite una brusca reducción de peso que claramente tiene mayor riesgo de producir efecto rebote. posterior.
Asimismo, es muy pobre en hierro y aconseja infusiones como café o té que poseen taninos que junto a la fibra de la avena, frutas y verduras puede ser perjudicial para personas en riesgo o con anemia ferropénica.
Por otro lado, es una dieta temporal, poco sostenible en el tiempo y que sólo puede desencadenar más ansiedad y deseos de comer los alimentos prohibidos de la misma, porque son numerosos y muy habituales, por ejemplo: se prohibe el pan, carnes, pescados, pastas, arroz, alimentos sanos pero que se encuentran ausentes en esta dieta.