En todas las etapas de la vida sostener una ingesta adecuada de frutas y verduras es fundamental, pero especialmente durante el embarazo es recomendable aumentar el consumo de frutas y verduras frescas para contribuir a la salud de la mujer gestante.
Las frutas y verduras frescas facilitarán la cobertura de la cuota diaria de diferentes micronutrientes, sobre todo vitamina C, vitamina A, potasio, magnesio y otros, pero además, ayudarán a consumir más agua lo cual previene molestias propias del embarazo como la retención de líquidos y la mala circulación de la sangre.
Asimismo, dijimos que en España se consume poca fibra y aumentar la ingesta de frutas y verduras durante el embarazo ayuda a evitar el estreñimiento propio de esta etapa biológica al mismo tiempo que da saciedad y ayuda a prevenir un aumento de peso excesivo durante la gestación.
Por último y fundamental, lo que la madre consume en el embarazo repercute en la salud futura del niño en desarrollo, por lo tanto, nada mejor que consumir más frutas y verduras para nutrir saludablemente al bebé en gestación y beneficiarlo a largo plazo.
Imagen | Futurestreet