Esto no es ningún secreto, conforme han ido pasando los años y se ha asentado el estado del bienestar, las comidas españolas se han llenado de grasa, hasta un 44% más las de hoy que las de hace 40 años.
Son datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), lo que significa que hoy en día casi el 46% de nuestra dieta es a base de grasas, cuando las recomendaciones son del 30%.
La culpa de esto: el paso de un país relativamente pobre a un país relativamente rico en poco tiempo y con poca información nutricional para asumir cambios, la abundancia de preparados y precocinados, por no hablar de la comida rápida, todo producto de la falta de tiempo que no deja ni para comer.
Por estos datos y estas características no es de extrañar que la población española, que tampoco hace ejercicio, vaya caminito de ser un país de obesos y en el que abundarán las enfermedades cardiovasculares, diabetes y demás dolencias relacionadas con una malnutrición por exceso.
Claro está que no toda la población está en esta situación, pero si se puede anunciar que la mitad de los españoles cumple este exceso de grasa en su dieta y la falta de ejercicio. Como no empecemos a movernos (literalmente), vamos derechos a seguir los pasos de Norteamérica, el país de obesos por excelencia.
Vía | El Confidencial En Vitónica | España sigue engordando En Vitónica | ¿Cuán obeso está el mundo?