Hacer dieta engorda: dos grandes expertos nos hablan de por qué el cambio de hábitos es mejor que la dieta, de cara al verano y a largo plazo

Falta poco más de un mes para la llegada del verano, pero ya ha comenzado el buen tiempo y, con él, las prisas de cada año por intentar perder peso.  No es de extrañar, teniendo en cuenta que no paramos de ver informaciones y noticias que nos animan a ponernos con la totalmente innecesaria - e infructuosa - "operación bikini". 

Es posible que, en las prisas que llegan con esta temporada, busquemos formas rápidas de perder peso. Estos esfuerzos suelen acabar en fracaso absoluto, cuando no en riesgos innecesarios para nuestra salud. Por ello, hemos hablado con dos expertos, Juan Revenga (@juan_revenga) dietista-nutricionista y con Víctor Reyes (@fitnessrealoficial) creador de fitnessreal.es para que nos den sus opiniones sobre cómo conseguir empezar a cuidar nuestra salud y ponernos en forma sin caer en locuras inseguras. 

No hacer dieta es el primer paso

Con respecto a esto, Juan Revenga se muestra muy claro: "no hagáis dieta; hacer dieta engorda". Él lo tiene claro, su recomendación es que no da ninguna recomendación para que la gente se ponga a dieta: "cada cuatro meses - antes del verano, en septiembre, como propósito de Año Nuevo, etc. - tenemos una llamada al descontrol dietético" nos indica, "pero esto se ha ido extendiendo a todo el año". 

Víctor Reyes señala las locuras que se hacen en estas y otras fechas:  los meses previos al verano suelen ser, junto con la época post-navidad,  uno de los más complicados cuando hablamos de pérdida de peso y en los que más locuras se cometen. No es porque en estos meses cueste más  perder peso o grasa por arte de magia, sino porque la gente se ve con el  verano encima, quiere tener un físico determinado que necesita un  trabajo importante y nota que no tiene tiempo material para lograrlo. Y entonces entran las prisas y con ellas las locuras.

Desde el punto de vista de Revenga esta no es una situación nueva: "desde hace 50-60 años se vienen dando las mismas recetas para perder peso en momentos puntuales y con estas lo único que ocurre es que estamos a 'dieta' todo el año". Cualquier consejo que se dé sobre alimentación en estos momentos puntuales es animar a hacerlo temporalmente - mientras dura la época oficial de pérdida de peso - para abandonarlos después. 

Revenga nos explica la poca utilidad de hacer dietas  de manera periódica: "poblacionalmente hablando, hacer dieta engorda. Cuántos más periodos de dieta hace la gente, más engorda". Para el nutricionista, uno de los problemas es que nos han vendido - y nos siguen vendiendo - la importancia del peso, cuando no es lo más importante tal y cómo el mismo cuenta en El Comidista.

Alejarnos del ideal de peso a corto plazo y pensar en un cambio de hábitos

Reyes lo tiene muy claro: " la realidad es que muchas personas que quieren perder peso para este verano...ya van tarde ". Sabe que esto no es lo que queremos escuchar, pero nos anima a alejarnos de las prisas: "en mi experiencia las prisas son muy malas para lograr objetivos". 

Ambos se centran en los hábitos a largo plazo: "lo  que tiene que quedar claro es que si una persona lleva una vida  sedentaria, con hábitos alimentarios nefastos, no entrena nunca, duerme  mal y tiene un grado de estrés elevado (todos ellos factores cruciales a  la hora de perder grasa corporal y maximizar la composición corporal)  no puede pretender cambiar esto en 1-3 meses y esperar resultados a  largo plazo" asegura Reyes.  

Juan Revenga también se centra en los hábitos saludables: "cuando hagas las cosas bien (en materia de hábitos de vida) tu peso será el que tenga que ser con tus hábitos saludables. Dependiendo de los hábitos que tenemos seguramente el peso se vea influido, pero será el que tenga que ser, el que te corresponda".  De esta manera, el nutricionista pone el foco y la importancia en la salud quitándosela al peso: " ahora, en mi consulta, hay muchas veces que no peso a ciertos pacientes" nos indica. 

La importancia de centrarnos en la salud más que en el peso

Y es que, tal y como nos cuenta Víctor Reyes, intentar conseguir en dos meses o menos un cambio radical suele conllevar bastantes conductas arriesgadas lo que puede afectar a nuestra salud a largo plazo: " Sí, si haces locuras a nivel nutricional y con el ejercicio puede que pierdas una cantidad de peso significativa  para verano. Pero déjame decirte que, aunque lo parezca, esto no es una  victoria". 

Entre otras cosas, porque como nos indica, al centrarnos en la pérdida de peso no nos fijamos en si es grasa lo que perdemos y podemos llevarnos masa muscular por delante. Además, estas locuras y acciones radicales son extremadamente difíciles de equilibrar con nuestra vida normal y: "lo que se va rápido, vuelve rápido. El éxito no reside en perder mucho peso en poco tiempo.  Si haces algo que no puedes llevar a cabo a largo plazo no puedes  pretender que cuando vuelvas a los hábitos anteriores tu cuerpo no  vuelva a estar como estaba antes". 

Pero no solo eso,  es que, el bajar de peso si no estamos saludables no va a ayudarnos a vivir mejor ni a alargar nuestra esperanza de vida. El propio Revenga nos recuerda: "si no siguen los que se han considerado los cuatros hábitos de vida más importantes y saludables (no fumar, no consumir alcohol, realizar actividad física habitual y aumentar el consumo de alimentos vegetales), tanto las personas con normopeso como las personas con sobrepeso tienen el mismo riesgo de fallecimiento. 

Por ello, lo realmente adecuado en estas fechas - y en cualquiera - sería cambiar de hábitos para cuidar nuestra salud y no con la única motivación de perder peso. Para ello, Juan Revenga recomienda analizarnos a nosotros mismos: "analiza qué cosas estás haciendo mal y qué cosas quieres cambiar. Si no tienes las herramientas necesarias para ello, acude a un dietista-nutricionista". 

Reyes nos anima a tener cierto realismo para con nuestra situación: " esto significa que ahora tienes trabajo que hacer, pero el objetivo es a  medio plazo. Significa que empieces a cambiar paulatinamente tu estilo  de vida hacia uno mucho más saludable. Sin prisa, incorporando hábitos  saludables poco a poco y sin esfuerzo para que no sea algo momentáneo y  que pasado el verano se vaya al traste, sino que pase a ser parte de tu  estilo de vida y puedas mantener los resultados a largo plazo"

Revenga  nos deja un último consejo valioso: "no te fijes en el peso. Que la cifra no sea la vara de medir tus éxitos en tus cambios de vida. 

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