Cuidar la calidad de la dieta resulta clave al momento de lograr una alimentación sana, y para ello, no sólo debemos escoger adecuadamente los ingredientes que empleamos sino también, la forma en que los cocinamos. Por eso, te mostramos los métodos de cocción más usados en la cocina, ordenados del más al menos saludable.
Los más sanos métodos de cocción
Para elaborar este ránking hemos incorporado los métodos de cocción más frecuentemente utilizados en casa y consideramos la modificación de nutrientes que ocasionan así como la posibilidad de emplearlo con diferentes ingredientes y de ponerlo en práctica en casa.
Por ello, los métodos de cocción más sanos a nuestro criterio son:
Puestos del 1 al 3: las más frecuentes y que ayudan a conservar nutrientes
Puesto | Métodos de cocción |
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1 | Plancha o parrilla |
2 | Al vapor |
3 | Horno |
En el primer puesto hemos colocado la cocción a la plancha o parrilla como un método en seco que adiciona poco aceite, permite cocinar en poco tiempo y conservar nutrientes de diferentes alimentos, ya que en ella podemos elaborar verduras, carnes, pescados y demás.
En el segundo puesto ubicamos la cocción al vapor ideal para verduras, ya que permite cocinar sin perder textura, sabor, color ni nutrientes de estos alimentos, al evitar sumergirlos en agua.
Y en el puesto número tres colocamos la cocción al horno que admite variedad de ingredientes y técnicas de cocina y que permite cocinar en seco, en poco o mucho tiempo alimentos sin que éstos pierdan muchos nutrientes. Es recomendable para carnes, pescados y verduras.
Puestos del 4 al 6: simples, frecuentes y nutritivos
Puesto | Métodos de cocción |
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4 | Microondas |
5 | Escaldado o blanqueado |
6 | Hervido |
En el puesto número 4 ubicamos la cocción al microondas que de forma rápida, simple y sin perder nutrientes nos permite cocinar todo tipo de ingredientes, ayudando a comer sano sin complicaciones, pues básicamente es una cocción al vapor pero más sencilla de realizar.
En el puesto 5 ubicamos el método de escaldado o blanqueado que consiste en un rápido hervor para cocinar al dente vegetales o pescados y mariscos y no perder textura ni nutrientes de los mismos. Es ideal para elaborar vegetales congelados en casa.
En el puesto 6 colocamos el hervido, recomendable para legumbres y cereales aunque también podemos usarlo para otros ingredientes, es fácil ya que consiste en sumergir en agua a punto de ebullición los alimentos, pero puede propiciar la pérdida de algunos nutrientes.
Puestos 7 y 8: con grasas pero sin excesos y conservando nutrientes
Puesto | Métodos de cocción |
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7 | Estofado o guisado |
8 | Salteado |
En el puesto 7 ubicamos los estofados y guisados que consisten en rehogar ingredientes en un medio graso que no resulta excesivo y después terminar la cocción en un medio líquido. Se utilizan para platos de cuchara habitualmente y si bien adicionan un poco de grasa, esta no es excesiva y permiten conservar nutrientes en el resultado final.
En el puesto 8 ubicamos el salteado que en un medio graso que no es excesivo y a altas temperaturas se pueden cocinar variedad de alimentos, en un tiempo relativamente corto. Se utiliza para verduras, carnes, setas y demás preparaciones como todas aquellas al wok, entre otras.
Últimos puestos: las mas grasas o que pueden generar sustancias nocivas para el organismo
Puesto | Métodos de cocción |
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9 | A las brasas |
10 | Frituras |
En los dos últimos puestos de nuestro ránking que ordena los métodos de cocción del más al menos sano ubicamos la cocción a las brasas en donde los alimentos se exponen directamente al fuego y por ello, se suele formar una costra tostada o chamuscada que puede dar origen a hidrocarburos policíclicos así como de aminas heterocíclicas que tienen poder mutágeno y promueven la inflamación en el cuerpo.
Y en último lugar ubicamos las frituras que también pueden dar origen a sustancias nocivas como las antes dichas o a grasas trans y que añaden calorías derivadas de lípidos en excesos ocasionando además, una pérdida de nutrientes en el medio de cocción.
Sin duda estos dos últimos métodos son los menos aconsejables o los que con menos frecuencia debemos usar para nuestros alimentos siendo los más adecuados todos los antes mencionados, sobre todo, los primeros seis del ránking.
Imagen | iStock
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