Somos poco eficientes gastando calorías a través del ejercicio: si quieres perder peso, que no falte la dieta

Una de las recomendaciones más habituales a la hora de incentivar la perdida de peso es la de que hagamos dieta saludable y deporte. Normalmente, estas dos pautas van ligadas y son el mejor de los consejos si se trata de mantener una vida activa y saludable que alargue nuestra esperanza de vida.

Sin embargo, si hablamos única y estrictamente de perder peso, la realidad es que hacer ejercicio no tiene el mismo peso que llevar una dieta adecuada y saludable. Y es que no somos demasiado eficientes quemando calorías, por lo que pretender adelgazar únicamente mediante deporte no suele ser una buena idea. En lo que a la pérdida de peso se refiere, nuestra alimentación es la que más importancia tiene.

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Cómo perdemos peso

Es innegable que el deporte ayuda a perder peso tal y como han demostrado varias investigaciones en los últimos años. Sin embargo, no es la forma más eficaz de hacerlo ya que para perder peso necesitamos conseguir un déficit calórico que no es más que el quemar más calorías de las que ingerimos y así dicho suena sencillo, pero nada más lejos de la realidad.

Y es que nuestro cuerpo es muy eficiente aprovechando la calorías que consumimos y haciendo uso de ellas, pero muy lento quemando las mismas calorías. Esto tiene - o tenía - cierto sentido si tenemos en cuenta que nuestro organismo toma de los alimentos que ingerimos la energía que necesita para funcionar y la energía que no es consumida se acumula en forma de grasa para momentos de necesidad.

Esto era muy útil en tiempos en los que el consumo de alimentos calóricos era muy escaso y nuestro cuerpo necesitaba adaptarse de tal manera que aprovechara al máximo dichas calorías y no las perdiera fácilmente. Sin embargo, este mecanismo tan eficiente es el que provoca que, ahora que ingerimos alimentos muy calóricos, nos resulte muy difícil quemarlos.

Quemar calorías a través del ejercicio

Sabiendo esto podríamos pensar que al aumentar la intensidad del deporte estaríamos quemando más calorías y, por tanto, seguro que perdemos peso. Las investigaciones demuestran que el deporte que tendríamos que hacer para quemar las calorías de algunos alimentos es mucho más del que podríamos imaginar.

Así, por ejemplo, en 2017 la Clínica Mayo realizó un informe en el que recogía el número de calorías que quemabas realizando diferentes deportes. En los ejemplos ponían a una mujer que pesara unos 76 kg y un hombre que pesara unos 88kg.

Para que os hagáis una idea, una mujer con un peso similar quemaría 365 calorías por hora trotando en la elíptica, mientras que el hombre quemaría unas 455 calorías por hora. Jugando al baloncesto se quemarían unas 584 calorías la mujer y unas 728 calorías el hombre. Por poner solo un ejemplo, una ensalada cesar tiene unas 1000 calorías.

Anteriormente, en 2016, la Royal Society for Public Health también recogía en una tabla cuánto ejercicio había que hacer para quemar calorías, pero esta vez comparándolo con las ingeridas con ciertos alimentos. Así, por poner algunos ejemplos, para quemar un cuarto de pizza (449 kcal) tendríamos que caminar rápido durante casi hora y media o bien correr durante 43 minutos. En el caso de un postre como los muffin (265 kcal) tendríamos que caminar rápido unos 48 minutos o correr 25 minutos, Obviamente el esfuerzo es muy alto en comparación con lo ingerido.

La realidad es que, por mucho que nos gustaría, ningún deporte compensa el hecho de que comamos comida basura o que consumamos un exceso de calorías. Si queremos perder peso tenemos que conseguir crear un déficit calórico y, aunque el deporte puede ayudarnos, eso empieza con la alimentación.

No son solo las calorías

En cualquier caso, debemos también tener en cuenta que a la hora de perder peso no todo son las calorías, sino qué tipo de calorías ingerimos y de dónde estamos perdiendo el peso. Dos alimentos pueden aportarnos el mismo número de calorías, pero el efecto en nuestro cuerpo será diferente ya que se almacenan de manera distinta.

Por ejemplo, las calorías provenientes de bebidas azucaradas elevan nuestros niveles de glucosa y no nos sacian. Sin embargo, las mismas calorías provenientes del pollo conllevan un gran aporte de proteínas, lo que nos ayuda a saciarnos. A la hora de perder peso debemos conseguir un déficit calórico, sí. Pero también debemos asegurarnos de que las calorías que consumimos nos estén aportando buenos nutrientes, que nos sacien y cuiden nuestra salud. Lo importante es que adquiramos unos hábitos saludables.

Y ahí sí que entra el deporte y ejercicio físico. Tener un peso adecuado es bueno para nuestra salud, pero de poco servirá si bebemos alcohol de manera habitual, si fumamos o si somos total y absolutamente sedentarios. Hacer deporte nos ayudará a mantenernos activos, a mejorar nuestro metabolismo, a envejecer de manera más saludable y activa, a cuidar nuestra salud cardiovascular, y a cuidar nuestros huesos y músculos entre otras cosas. Además, ayudará a que nuestra pérdida de peso vaya acompañada de una mejora en la composición corporal.

Imágenes | Unsplash

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