Alergia y entrenamiento al aire libre: cómo prepararnos y qué precauciones debemos tomar

La primavera ya ha entrado de lleno y los alérgicos lo sabemos mejor que nadie. No en vano, ya han empezado los estornudos, los picores de ojos, las narices congestionadas y la tos alérgica. Si esto resulta molesto para todos los que tenemos alergia, todavía lo es más para aquellas personas que entrenan al aire libre - ya sea por necesidad o por placer -.

Los alérgicos sabemos que en estas fechas necesitamos tomar precauciones concretas para evitar mayores problemas. Pero si vamos a salir a entrenar al aire libre, estas medidas tienen que ser todavía más específicas. Así podemos prepararnos para el entrenamiento estos días.

Qué podemos hacer para entrenar al aire libre con seguridad si somos alérgicos

Consultar los niveles de polen para elegir los días y horas a la que salir

En la página web de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), podemos consultar los niveles de polen que hay cada día. Es importante que consultemos la web a diario para saber qué días los niveles están más bajos y escoger estos para nuestros entrenos.

Consultar las horas a las que hay menos nivel de polen también es importante. Lo habitual es que a primera hora de la mañana - entre las 5 y las 10 de la mañana - y a última hora de la tarde - entre las 7 y las 10 de la tarde - sean los horarios con más incidencia de polen. En cualquier caso, puede variar dependiendo de las condiciones ambientales, por lo que es importante que lo consultemos.

Mejor los días después de que llueva

Los días de lluvia en primavera pueden parecer un fastidio, pero la realidad es que, si queremos entrenar al aire libre, pueden ser de gran ayuda. Con la lluvia se limpia un poco el ambiente y hace que se reduzcan los niveles de polen. Por ello, si llueve, podemos elegir los días siguientes para entrenar con más tranquilidad.

Haz uso de mascarillas y gafas de sol

Durante estos días de desconfinamiento, por causa del COVID-19, tendremos que entrenar con mascarilla si no podemos guardar la distancia de seguridad. Esto puede ser una ventaja para los alérgicos que quieran salir a entrenar al aire libre, ya que la mascarilla puede ayudarnos a evitar los efectos del polen, pero requiere un tiempo de adaptación.

Además, podemos usar gafas de sol adecuadas para evitar que el polen nos entre en los ojos y nos cause picores y molestias.

Importante también el lugar donde entrenamos

Al contrario de lo que puede parecer, la ciudad no es el mejor lugar para entrenar ya que la contaminación puede hacer que el polen sea todavía más agresivo en nosotros. En cualquier caso, el campo tampoco es el lugar más adecuado. Si vivimos cerca del mar, entrenar cerca de a playa puede ser el escenario ideal.

Mantenernos bien hidratados

Aquellas personas que tenemos alergia sabemos que una de las características de estos días es que sentimos las vías respiratorias obstruidas y muy resecas. En estos días es extremadamente importante que nos mantengamos bien hidratados de manera que las mucosas estén menos secas. El consumo de suficiente agua, ya sea mediante líquido o por alimentos como la fruta o la verdura, es más importante que nunca.

Limpiar muestra ropa y ducharnos después del entreno

Aunque puede depender del tipo de alergia, lo habitual es que los efectos nocivos del polen se presenten alrededor de una hora después de haber sido expuestos. Por ello, es especialmente importante que después de salir a entrenar, cuando lleguemos a casa, echemos toda la ropa a lavar y nos duchemos. De esta manera evitaremos que el polen que hayamos arrastrado en nosotros nos afecte tanto.

Consultar con nuestro médico y seguir nuestro tratamiento

Si sufrimos alergia es importante que, antes de salir a entrenar al aire libre estos días, consultemos con nuestro médico para que nos dé pautas adecuadas. Además, si tenemos un tratamiento tendremos que seguirlo tal y como nos indique el especialista, de manera que nos evitemos todavía más problemas.

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