Desde el momento en el que entramos a entrenar en el gimnasio hemos visto una especie de escaleras ancladas en la pared, y muchos de nosotros no sabemos lo que realmente son. No es que en nuestro gimnasio se hayan vuelto locos y la decoración sea de lo más extraño, sino que se trata de espalderas.
Las espalderas son una construcción de madera con barrotes a modo de escalones que se coloca de forma fija en la pared con la finalidad de servirnos como medio para entrenar las diferentes partes de nuestro cuerpo. Hace unos años las espalderas eran un complemento estrella en las rutinas deportivas. En la actualidad no se utilizan demasiado a pesar de ser un perfecto compañero de entrenamiento, ya que en ellas podemos trabajar todas las partes del cuerpo.
Lo bueno de las espalderas es la versatilidad que nos ofrecen y la capacidad para poder realizar cualquier tipo de movimiento sobre ellas, y es que los barrotes que tienen dispuestos de forma horizontal, al estar distribuidos de diferentes formas nos ayudarán a elegir una u otra altura para realizar nuestras rutinas, o poder acoplar diferentes aparatos que nos servirán de apoyo.
Ante todo las espalderas son una forma de anclaje. Su uso nos va a permitir entrenar solos y conseguir una gran estabilidad en todos los ejercicios. En ellas podemos trabajar cualquier parte del cuerpo, desde los abdominales, las piernas, los brazos, glúteos, espalda, gemelos… Al fin y al cabo es el mejor punto de anclaje que vamos a encontrar y que además nos permite escalar y realizar rutinas suspendidos en alto.
Pero no solamente la espaldera es un perfecto aliado de nuestras rutinas, sino que nos ayudará a realizar estiramientos perfectos de todas las partes del organismo. Ya sabemos la importancia que un buen estiramiento tiene a la hora de relajar los músculos después del ejercicio y devolverles su estado habitual. Por este motivo la espaldera va a estar presente tanto durante el entrenamiento como en la fase de recuperación.
Si nos servimos de aparatos como bancos, colchonetas… que colocaremos en la espaldera podremos enriquecer aún más las rutinas y dotarlas de cierta dificultad, ya que en el caso de los bancos los podemos colocar de forma inclinada para realizar abdominales por ejemplo, o podemos utilizarlos para hacer elevaciones… La espaldera desde luego que nos brinda infinidad de posibilidades debido a las diferentes alturas de sus barrotes que conferirán mayor o menor dificultad a los ejercicios.
A partir de ahora tenemos que tener presente la utilidad de este aparato, pues es uno de los mejores y más versátiles anclajes que existen. Utilizando espaldera en los entrenamientos combinaremos rutinas más complejas con la variación de ejercicios, ya que existen infinidad de posibilidades a la hora de entrenar ayudados de una espaldera.
Imagen | Reort
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