Como corredor habitual, una de mis primeras compras e inversiones cuando comencé a tomarme más en serio mis carreras de urbanita fue la de un pulsómetro. Gracias a él iba a conseguir controlar mi ritmo cardiaco, saber cuantas calorías quemaba y la distancia recorrida, además de por supuesto, el tiempo que llevaba realizando ejercicio físico.
Yo pensaba que este aparatejo era un gadget beneficoso y que ese beneficio estaba fuera de toda duda. Pues bien, expertos del deporte discuten ahora sobre si estos pulsómetros son o no beneficios para el entrenamiento.
En varias ocasiones se han observado a atletas que mientras competían, observaban atónitos una y otra vez su pulsometro viendo datos que no se correspondían con sus realidades físicas, demasiado ritmo cardiaco...
Los expertos explican que algunos deportistas desarrollan la llamada conciencia cinestecica que no es otra cosa que un sentimiento que les permite analizar sin la necesidad de aparatos y herramientas externas su organismo en pleno ejercicio físico. Esto es beneficioso ya que permite no depender de un sistema que te avisa cuando superas el límite previsto de tu físico cuando sientes que aún puedes dar un poco más.
Y vosotros ¿utilizais los pulsómetros como arma deportiva o dependeis más de vuestra propia sabiduría deportiva?