Las patatas fritas son el tentempié preferido de la mayoría de nosotros, pero todos sabemos que su consumo debe ser moderado debido a las características nutricionales de las mismas.
Por eso, en grandes oportunidades escogemos una bolsa chica de patatas fritas con el objetivo de quitarnos el antojo sin comer de más.
Sin embargo, una investigación holandesa ha comprobado que pocos de nosotros podemos consumir sólo uno de estos pequeños antojos, y culminamos comiendo más que si hubieramos elegido una bolsa grande de este aperitivo.
El estudio se llevó a cabo con estudiantes y se observó, que luego de indicarles que pensarán en el peso corporal, un 25% de ellos optó por las bolsas grandes, mientras que la mayoría restante eligió las bolsas pequeñas.
Pero los estudiantes que prefirieron las "miniversiones" de patatas fritas terminaron comiendo el doble que el resto de las bolsas grandes.
Ésto puede deberse a que, como ocurre con otros productos, la gente cree que la porción ya está medida y por ello, no se controla en su ingesta.
Algo similar a lo que sucede cuando la gente desconoce el verdadero fin de los productos bajos en calorías o en grasas y acaba con un frasco de dulce sin azúcar sin darse cuenta.
Las "miniversiones" o bocados pequeños de los snacks, en realidad, engañan a las personas bajo la creencia de que es un pequeño tentempié que puede conumirse con tranquilidad.
Por ello, quizá sea momento de restringir estas versiones como así también las publicidades que atrapan a los consumidores en perjuicio de su salud.
Cada vez son más los estudios que confirman que la publicidad es un factor fuertemente involucrado en el origen de la obesidad. ¡No nos dejemos engañar!
Vía | BBC En Vitónica | ¿Por qué engrodan tanto las patatas fritas? En Vitónica | Demasiado grasa en las bolsas de patatas fritas (no todo aceite vegetal es saludable)