Desde siempre hemos creído que la gente con sobrepeso suda antes que la gente delgada. Esto es simplemente un mito pero la realidad está muy lejos de los estereotipos y las cosas son muy diferentes.
La sudoración es una forma de autorregulación de la temperatura corporal. Es una medida que el cuerpo humano tiene para expulsar el exceso de temperatura que se produce en el organismo al llevar a cabo un ejercicio físico.
El sudor, además de ser un regulador de la temperatura del organismo, tiene lugar cuando el metabolismo se acelera debido al ejercicio físico. Es por esto que es un síntoma que va alejado de la fatiga en contra de lo que mucha gente piensa que considera el sudor como un síntoma de baja forma.
El sudor, al actuar como regulador de la temperatura corporal es un síntoma de que nuestro cuerpo funciona correctamente. La sudoración es un efecto de una buena forma física pues es un medio que nuestro cuerpo utiliza y por el que seremos capaces de practicar durante más tiempo el ejercicio que estamos llevando a cabo.
Normalmente se cree que la gente con sobrepeso suda más que la gente más delgada. Esto no es del todo cierto pues si la persona tiene una buena forma física la sudoración será mayor independientemente de tener o no más peso. Es cierto que cuanto más peso tengamos sudaremos antes porque el cuerpo va a tender a regular la temperatura.
El sudor no aparece a la vez en personas con un peso u otro, pues las personas con un peso más elevado comenzarán a sudar más rápido ya que en la mayoría de los casos el esfuerzo que realizan al realizar un mismo ejercicio es mayor que el que lleva a cabo una persona más delgada que tiene menos masa grasa.
Sea como sea, el sudor es un aliado de nuestro organismo que estemos delgados o gordos nos ayuda a regular nuestro calor corporal, y es que es muy importante no sobrecalentarnos, pues cuanto más temperatura alcance nuestro cuerpo, menos aguantaremos realizando un ejercicio.
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