La gran mayoría de la población excede la recomendación diaria de no consumir más de 2300 mg de sodio, que se sabe es un factor de riesgo para enfermedades cardiovasculares. Y si bien sabemos que la mayor parte de la sal deriva de productos elaborados, hoy te contamos cuáles son las principales fuentes de sodio en nuestra dieta para que podáis identificarlas y reducir su presencia.
Un estudio estadounidense arrojo una lista de los 10 alimentos que mayor sodio aportan a la dieta de su población, ya sea porque se consume en grandes cantidades o porque son alimentos con alto contenido en este mineral, pues aquí compartimos algunos alimentos de los siguientes que por su amplio consumo, pueden ser las principales fuentes de sodio en nuestra dieta también:
Pan y productos de bollería: tienen alto contenido en sodio, pero sobre todo, su protagonismo como fuente de este mineral se debe a su extendida ingesta y a su presencia diaria. Una buena opción es buscar pan sin sal agregada.
Embutidos y carnes curadas: en España somos amplios consumidores de jamón, ahumados y embutidos que se sabe, pueden ofrecer gran cantidad de sodio, por eso, reducir las carnes procesadas en nuestra dieta en este caso puede ser de gran ayuda.
Pizza: la pizza es un alimento reconocido y consumido ampliamente a nivel mundial, pero en este caso como en el anterior, representa una fuente concentrada de sodio, por ello, reducir su ingesta a comidas ocasionales es la mejor opción.
Sopas o caldos concentrados: en invierno, cuando su consumo es mayor, el sodio que éstos alimentos concentrados en el mineral pueden ofrecer es muy alto, por eso, la mejor alternativa es su dilución mayor o su elaboración en casa, con un agregado controlado de sal.
Hamburguesas: la comida rápida cada vez ocupa un lugar mayor en nuestra dieta y sus ingredientes desde el pan, hasta la carne y el queso, poseen cantidades apreciables de sodio, una vez más la solución es reducir su consumo a eventos especiales y no hacer de ellas un alimento habitual en nuestra dieta.
Queso: otro alimento muy consumido en España que como el resto de los alimentos curados ofrece gran cantidad de sodio, la solución es consumir porciones moderadas a diario, buscar quesos más blandos que son los que menos sal concentran o también buscar alternativas de quesos bajos en sodio o sin agregado de sal.
Snacks comerciales: patatas fritas de bolsa, palomitas de maíz, cacahuates fritos y salados, palitos de maíz y otros también deben reducirse en la dieta habitual por ser fuente concentrada de sodio.
El 75% del sodio que consumimos a diario proviene de alimentos que no se elaboran en casa y sólo el 5-6% deriva de la sal que añadimos a la comida durante la cocción, por eso, es claro que reducir la comida rápida y preelaborada así como escoger productos con bajo contenido de sodio y cocinar más en casa es un truco clave para controlar el consumo de sodio en nuestra dieta.
Sabiendo cuáles son las principales fuentes de sodio en nuestra dieta, podemos identificar si tenemos un alto consumo y saber cómo reducir la ingesta de este mineral a diario
Imagen | Otto Phokus