Como ya hemos comentado en anteriores post, existen muchos mitos en relación al entrenamiento. Uno muy extendido es el que tiene que ver con la forma de alimentarnos cuando vamos a realizar ejercicio. Mucha gente piensa que no hay que comer ni beber nada antes de entrenar o mientras se está llevando a cabo el ejercicio....
Esta creencia está más extendida de lo que creemos, hasta el punto de que hay muchos deportistas que no prueban ni líquido ni alimento antes ni durante lo que dure su entrenamiento. Un error que afectará al rendimiento general y empeorará la respuesta de nuestro organismo frente al estrés provocado por el esfuerzo físico. Vamos a ver algunos de los errores cometidos en cuanto a alimentación y como remediarlos:
Mucha gente piensa que beber agua antes y durante el entrenamiento es perjudicial porque afecta al rendimiento ya que hace que nos sintamos más pesados. Esto no es para nada cierto, pues nuestros músculos y articulaciones necesitan estar hidratados para rendir más y afrontar mejor el esfuerzo. Además, mientras practicamos deporte nuestro cuerpo segrega sudor a través del que perdemos minerales y demás nutrientes que tenemos que reponer mediante la ingesta de líquidos.
Realmente lo que afecta a nuestro rendimiento es no beber. Los líquidos son importantes al igual que los nutrientes que conseguimos a través de los alimentos. Es por esto que es necesario seguir una buena alimentación. Si vamos a practicar deporte los hidratos de carbono serán un aliado perfecto que dotará a nuestro cuerpo de la energía necesaria para rendir al máximo.
Este aporte de nutrientes e hidratación es necesaria durante todo el tiempo que dura la actividad pues nuestro cuerpo está consumiendo energía constantemente, por lo que es aconsejable consumir habitualmente alimentos y líquidos mientras practicamos una actividad deportiva. Lo ideal sería ingerir alimento o líquido cada 20 minutos.
Un error habitual que muchos cometemos es consumir complementos antes de entrenar sin haber comido ni bebido correctamente pensando que nos van a dar el aporte necesario de energía para la actividad que vamos a realizar. Estas sustancias no son milagrosas y en ningún caso pueden sustituir a una buena alimentación. Simplemente son un apoyo para aportarnos un nivel de nutrientes que con los alimentos solamente no conseguiríamos.
Para nada debemos descuidar nuestra alimentación y menos en los momentos en los que nuestro cuerpo nos pide más. A partir de ahora tenemos que desterrar los falsos mitos y dejarnos llevar por el sentido común, y es que a más esfuerzo mayor consumo de energía.
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