Dos maneras de hacer sentadillas, carga al pecho y carga a la espalda

La sentadilla es un ejercicio que suele estar presente en la mayoría de las rutinas de entrenamiento a las que nos sometemos, y es que se trata de uno de los ejercicios estrella a la hora de fortalecer las piernas y conseguir que éstas tengan más fuerza. En anteriores ocasiones hemos comentado cómo deben hacerse para conseguir los mejores resultados, por ello en este post nos vamos a detener en dos modalidades, con la carga por detrás de la espalda o con la carga sobre el pecho.

La colocación de la carga es algo a tener en cuenta a la hora de hacer ejercicio, y es que no es lo mismo trabajar de una manera que de otra para conseguir los resultados que andamos buscando. Como hemos dicho en infinidad de ocasiones, lo recomendable es siempre mezclar una forma de realizar ejercicio con otra para así trabajar los músculos de manera completa sin correr el riesgo de mantener desequilibrios entre unas partes u otras. Por ello realizaremos dos tipos de sentadilla.

Sentadilla con el peso por la espalda

En primer lugar vamos a destacar la sentadilla con el peso en la espalda. Para la realización de ambas modalidades el peso será libre y lo vamos a cargar con una barra provista de dos pesos a ambos extremos de la misma. En este caso la barra la colocaremos sobre los trapecios. Es cierto que es la manera más habitual de realizar sentadilla y por ello es la forma en la que estamos acostumbrados a realizar este ejercicio.

Cuando colocamos el peso sobre la espalda a la hora de hacer sentadillas lo que conseguiremos será involucrar a esta parte del cuerpo en el ejercicio, ya que aunque trabajemos las piernas, indirectamente la espalda estará trabajando. Es cierto que si realizamos bien el movimiento y concentramos todo el empuje en las piernas conseguiremos fortalecer poco a poco la espalda de manera indirecta, además de estabilizarla, pero también corremos el riesgo de lesionarnos esta parte del cuerpo si la cargamos de demasiada tensión.

Esta manera de trabajar las sentadillas nos obligará a inclinar ligeramente la espalda hacia adelante, con lo que deberemos echar mucho más atrás las caderas, consiguiendo y pudiendo trabajar la sentadilla con las piernas más o menos separadas según lo que queramos conseguir con el ejercicio.

Sentadilla con el peso al pecho

La otra opción que proponemos es trabajar la sentadilla sujetando la carga sobre el pecho, es decir, por delante. De este modo la espalda se mantendrá al margen a lo largo de todo el ejercicio. En esta postura la parte del cuerpo que se verá más afectada será, por supuesto, las piernas, y toda la pared abdominal, ya que entran en escena los músculos del core. Por este motivo es importante que a la hora de elegir esta modalidad de hacer sentadilla sepamos que es necesario tener un abdomen fuerte pues permanecerá contraído a lo largo de todo el ejercicio.

En esta postura nuestra espalda permanecerá más recta, lo que nos obligará a mantener las piernas más separadas que al realizar la sentadilla con el peso por la espalda. Es una forma de trabajar que concentrará mucho más el empuje en las caderas y en los músculos que se encuentran en esta zona de las piernas. El trabajo de cuádriceps y de glúteos será mayor que con la sentadilla con el peso en la espalda.

Video 1 | Youtube/CrossFitSpain
Video2 | Youtube/sportizeme

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