En infinidad de ocasiones hemos presentado diferentes ejercicios para trabajar los abdominales sobre el suelo. En la mayoría de estos ejercicios simplemente la manera que teníamos de trabajar era a través de nuestro cuerpo y de su utilización sin más, mediante posturas y movimientos concretos enfocados a trabajar esta parte del cuerpo. Es cierto que realizar los abdominales con nuestro propio cuerpo es una muy buena manera de entrenar, a pesar de todo en esta ocasión queremos ver algunos utensilios que nos ayudarán a la hora de trabajar de diferente manera los abdominales.
Como ya hemos visto en infinidad de ocasiones, los cambios son necesarios en las rutinas de entrenamiento para conseguir evolucionar y lograr así que los músculos estén lo suficientemente motivados para crecer. Por ello este tipo de entrenamiento abdominal con nuevos aparatos nos ayudará a conseguir lo que andamos buscando, y es una mejor eficacia en los entrenamientos.
El suelo es un buen aliado a la hora de trabajar el abdomen, ya que sobre él podemos ejecutar infinidad de rutinas. Efectivamente en el suelo es donde vamos a seguir realizando las rutinas de entrenamiento, solo que en esta ocasión vamos a utilizar para ello diferentes aparatos que nos servirán de ayuda para dar un paso adelante en el desarrollo abdominal. Por este motivo el uso de estos aparatos está reservado a las personas que ya tienen un cierto control sobre los ejercicios abdominales y quieren seguir avanzando en su desarrollo.
Pesa rusa
En primer lugar vamos a utilizar una pesa rusa para la realización de un ejercicio. Antes de nada recordaremos como es la pesa rusa, y es que se trata de una bola de peso con un asa. Precisamente, esta bola de su composición será la que nos va a servir a la hora de ejercitar los abdominales, ya que sobre la bola de la mancuerna vamos a apoyar ambas manos. La postura en la que nos debemos colocar es la habitual que adoptamos al hacer flexiones. Es decir, las manos apoyadas en este caso sobre la pesa rusa, y el cuerpo estirado completamente mirando hacia abajo y con los pies apoyados por las puntas al suelo.
Para la realización de este ejercicio lo que haremos será partir de la postura antes descrita y manteniendo una pierna apoyada, con la otra lo que haremos será adelantarla hacia delante como si fuésemos a tocarnos el pecho con la rodilla. De este modo, y sin mover ninguna otra parte del cuerpo, y manteniendo el equilibrio conseguiremos fortalecer la parte central del cuerpo, ya que el ejercicio afectará a los abdominales, la parte lumbar y las caderas. El ejercicio lo realizaremos con cada pierna y debemos realizar una alternancia durante unos treinta segundos más o menos sin parar.
Goma elástica
Una goma elástica puede ser también un aliado mientras estamos realizando aperturas de pectoral con ellas. La manera de realizarlo será anclando uno de los extremos a la pared a la altura de nuestras caderas. El otro extremo lo agarraremos con una mano mientras nos colocamos de rodillas es el suelo mirando al frente, de modo que el brazo queda alineado con la goma elástica a la altura del pecho. En esta postura la pierna que queda del lado del brazo con el que tenemos asida la goma la dejaremos apoyada, mientras que la otra la adelantaremos hacia delante dejándola semi estirada.
En esta postura agarraremos con ambas manos la goma y realizaremos aperturas de pectoral. Es cierto que realmente con el ejercicio trabajaremos el pectoral, pero la pared abdominal se verá afectada, ya que es necesario que ella esté contraída en todo momento para evitar que el tronco se mueva de un lado a otro. Esta contracción nos ayudará a fortalecer la zona sin apenas darnos cuenta.
Imagen | Mike Slichenmyer