Si alguien nos pregunta la manera de trabajar los abdominales la mayoría de nosotros contestará que la mejor manera de hacerlo es mediante ejercicios abdominales. Es cierto que la combinación de ejercicios abdominales focalizados en cada zona de la pared abdominal, además de una dieta adecuada baja en grasas y de la realización de ejercicio aeróbico son la clave para marcar abdomen. A pesar de esto debemos tener en cuenta que otras acciones como la risa tienen un efecto directo en la pared abdominal.
Como hemos visto en infinidad de ocasiones, la pared abdominal es el centro de fuerza del cuerpo, y como tal interviene en infinidad de movimientos y actividades. Este es el motivo por el que al realizar otros ejercicios que no están focalizados en esta zona conseguimos trabajar la pared abdominal sin apenas darnos cuenta. Esto precisamente es lo que sucede con algunas acciones que llevamos a cabo en la vida cotidiana. Acciones como la risa en la que nos vamos a detener a continuación.
De los beneficios de la risa todos hemos oído en alguna ocasión, ya que es una muy buena terapia para mantenernos más alegres y con un estado de ánimo mucho más optimista. A nivel psicológico la risa es una buena manera de mantenernos en perfectas condiciones, pero no solamente se trata de una buena acción a nivel mental, sino que en nuestro cuerpo la risa desencadena una serie de mecanismos que ponen en acción una cadena amplia de músculos.
Para comenzar, la risa pone en marcha una serie de músculos de la cara que hacen que nuestro gesto se contraiga para realizar el movimiento que nos permitirá llevar a cabo la risa. Pero no solamente activamos con esta acción los músculos de la cara, sino que además pondremos en marcha todos los músculos que componen l pared abdominal. La risa activa una serie de mecanismos que hacen que los abdominales se contraigan y estén trabajando mientras nos reímos.
Activación del abdomen
El acto de la risa activa en nuestro organismo una serie de mecanismos que harán que se accionen infinidad de partes del mismo. Todos estos músculos que se activan recorren varias zonas de nuestra anatomía, ya que van desde la cara hasta la base pélvica, pasando por la pared abdominal que es la parte más afectada y en la que más incidiremos a la hora de reinos. El acto de la risa lanza una serie de impulsos que hacen que los músculos abdominales se contraigan y se relajen en cada carcajada como si se tratara de un ejercicio tradicional para trabajar el abdomen.
Al reírnos nuestro cuerpo reacciona de una determinada manera, y es que lo que hacemos es expulsar aire al exterior a la vez que conseguimos contraer la pared abdominal. Esta expulsión de aire lo que hace es que el perímetro de la cintura se reduzca, y con él lo que hagamos sea contraer los abdominales para lograr que la cintura se contraiga. Se trata de una serie de impulsos que nos harán trabajar al máximo esta zona sin apenas darnos cuenta.
Por esto es importante que le pongamos siempre a nuestra vida una nota de humor, ya que de este modo conseguiremos no solamente estar felices, sino que además lo que conseguiremos será trabajar nuestros abdominales sin darnos cuenta y así mantener un vientre tonificado y en perfectas condiciones. Por ello desde Vitónica recomendamos la risa como forma de entrenar el cuerpo de la mejor manera posible.
Imagen | Lluviavigo