También son muy contradictorios aqui los estudios y no se llega a un consenso. Parece ser que el único efecto secundario de tomar creatina es aumentar de peso, como consecuencia del arrastre de agua y la ganancia de masa muscular tras adecuados entrenamientos.
También es adecuado decir que no por tomar creatina el músculo crece sólo, la creatina es sólo un tipo de combustible para el organismo, pero por sí sólo no hace más que almacenarse junto a agua e igual puede parecer que hay crecimiento muscular. Sin entrenamiento no hay ganancia de músculo, por mucha creatina que tengamos.
En pocas ocasiones se han dado casos de calambres musculares, daños renales, deshidratación o diarrea, estos son más bien como consecuencia del tipo de creatina tomada y problemas en la absorción que en el efecto en sí de la creatina una vez absorbida, por eso es importante saber qué creatina tomar y en qué dosis.
Como hemos dicho la creatina es os móticamente muy activa y arrastra agua en su almacenamiento, de ahí que se de cierta preocupación en la adecuada hidratación del deportista, al que se aconseja que esté muy al tanto de sus necesidades hidricas mientras se suplementa con creatina.
Así, podemos decir que tomar creatina no supone en sí un peligro o riesgo para la salud, siempre hablando desde el punto de vista de una persona sana y sin ninguna contraindicación médica. Ningún estudio ha demostrado que la cretina produzca daño, al menos tomando las dosis recomendadas.
Eso sí, no todo el mundo responde del mismo modo a este tipo de suplementos y habrá casos en los que la creatina más que una ventaja sea un inconveniente. Es el caso de los deportistas que necesitan contar con poco peso, como los deportistas de fondo. La cretina al retener agua aumenta de peso y esto no es nada beneficioso para ellos.
También en los nadadores un aumento de peso no es beneficioso porque se reduce la eficacia de la flotación y del arrastre, así suplementarse con creatina es sopesar los pros que tiene el ganar masa y potencia muscular frente a los contras de ganar peso.
Mucha gente se vuelve reticente a tomar suplementos porque hay ciertas leyendas urbanas que dicen que al dar una sustancia de forma externa al organismo, este se vuelve vago y ya no la fabrica por sí mismo, por tanto si dejásemos de tomarla nuestro organismo ya no la fabricaría o le costaría más.
Este no es el caso de la creatina, cuando dejamos de tomarla los niveles de almacén van disminuyendo poco a poco en un periodo de 4 semanas hasta llegar a las reservas normales que suele tener el organismo, pero este no pierde su función de fabricarla.
Es cierto que al dar creatina de forma externa la fabricación endógena se ve un tanto alterada y disminuye, pero cuando se deja de tomar creatina este proceso se revierte y el cuerpo empieza a aumentar de forma automática la fabriacación propia de creatina.
En cuanto al peso, al dejar de suplementarnos puede que notemos cierto descenso en el peso y en la fuerza muscular, pero ese descenso siempre será por encima de los niveles iniciales a cuando empezamos a tomar creatina.
En Vitónica | Todo sobre la creatina (I): efectos en el deportista
En Vitónica | Todo sobre la creatina (II): tipos de creatina y dosis