Hay un pequeño truco que la gente suele desconocer cuando hacemos pesas. El preestiramiento entorno al 15-20% del músculo hace que se aumente la fuerza de forma considerable, por tanto podremos entrenar de manera más intensa y optimizar el trabajo del músculo.
Este preestiramiento del músculo hace que se activen más puentes de actina-miosina, que son las únidades básicas de contracción del músculo. Por tanto al haber más puentes activos se trabaja más proporción muscular, la contracción será mayor y por tanto la fuerza desarrollada también.
Este truco tiene un problema, y es averiguar cuánto es el 15-20% del estiramiento muscular, normalmente se hace a ojo, a modo que estiremos el músculo sin llegar a forzar, sin llegar a sentir esa tensión en exceso. El estiramiento excesivo consigue justamente el efecto contrario, que se activen menos puentes de actina-miosina y por tanto generemos menos fuerza.
Es un error hacer el movimiento rápido, porque ese estiramiento almacena energía elástica y estaremos limitando la intervención muscular. Por tanto los movimientos deben de ser lentos, y al llegar al inicio del movimiento para la fase positiva, esperar un par de segundo a que esa energía elástica se esfume y no intervenga sobremanera.
Poniendo un ejemplo, al hacer press de banca para trabajar el pectoral, cuando tenemos la pesa cercana al esternón, tiramos de los codos hacia atrás y notaremos como el pectoral se estira. En ningún momento el estiramiento debe ser excesivo, nos esperamos un par de segundos y tiramos hacia arriba. Con este simple gesto habremos trabajado más porción del músculo, y eso con el tiempo se nota.
En Vitónica | Pequeños trucos para mejorar el entrenamiento con pesas En Vitónica | Entrenamiento con pesas: Técnica anabólica