La natación es un deporte muy practicado tanto de forma profesional como de forma particular, además de que es un deporte sin impacto que puede ser muy adecuado en caso de que exista alguna patología degenerativa.
De todos modos, aunque sea un tipo de ejercicio cardiovascular muy aconsejable en ciertos casos no es tan fácil el realizarlo correctamente. Por ello, si acabas de empezar es conveniente que tengas en cuenta esta serie de consejos, para así sacar todo el partido de este deporte.
No dudes en pedir ayuda
Si realmente quieres aprender a realizar bien la técnica y sacar el máximo provecho a este deporte, lo ideal es que pidas consejo a un profesional.
El apoyo de un entrenador te ayudará a hacer los movimientos más eficientes y a reducir el cansancio, además de contribuir a evitar lesiones a causa de una mala ejecución de los movimientos.
Trata de aprender a respirar
Todo principiante comete el error de mantener la respiración cuando nada, pero el problema es que al nadar respiramos cuando podemos, no cuando queremos. Adquirir una buena técnica eliminará esa sensación de ahogo que tenemos al realizar este deporte.
En natación, a diferencia de otros deportes, se inspira rápido por la boca y se espira por la nariz. Un nadador experimentado respira con media boca dentro y media fuera, pero si eres principiante, trata de sacar toda la boca.
El proceso correcto consiste en inspirar fuertemente por la boca antes de meter la cabeza en el agua, y una vez allí expiraremos por la nariz hasta vaciar los pulmones.
Seguidamente, inspiraremos de nuevo por la boca al girar la cabeza para respirar y espiraremos por la nariz al meter la cabeza dentro del agua para hacer el movimiento.
Intenta ser constante con tu entrenamiento
Como en toda práctica deportiva, se requiere tiempo para mejorar y perfeccionar la técnica, por ello lo ideal es que planifiques y organices siempre de manera muy cuidadosa tu entrenamiento.
Establece los días a la semana que vas a realizar este deporte, preferiblemente realizando sesiones cortas pero frecuentes, para evitar una sobrecarga muscular.
No te olvides de adquirir una buena indumentaria
La indumentaria al nadar es más importante de lo que parece, por ello te aconsejamos realizar una inversión para adquirir un equipamiento de calidad que te permitirá alcanzar un rendimiento idóneo.
El bañador, el gorro y las gafas son complementos imprescindibles para poder realizar el entrenamiento con comodidad y efectividad. Por lo tanto, dedica tiempo en escoger cada uno de ellos de forma que se adapten lo mejor posible a ti y a tu nivel.
Prueba a usar las aletas para mejorar tu entrenamiento
Las aletas son herramientas muy interesantes de usar, ya que son muy útiles para mejorar tu estilo de nado y desarrollar tu condición física.
Dado que ayudan a la propulsión, te brindarán la opción de centrarte en la mejora de otros aspectos importantes en la natación, como la técnica de los ejercicios y la respiración.
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