El sudor es algo propio del ser humano, ya que como hemos comentado en infinidad de ocasiones, el sudor es una herramienta que nuestro cuerpo tiene para regular la temperatura y evitar así problemas mayores derivados de un mal control de esta. A pesar de todo para muchas personas la sudoración es todo un problema porque se acaba convirtiendo en mal olor corporal, algo que hace que esas personas se sientan acomplejadas y coartadas. Por ello en este post queremos dar algunos consejos para evitar el mal olor corporal.
Normalmente achacamos el mal olor corporal a una cuestión de falta de higiene. Hay casos en los que esto es así, pero en la gran mayoría es algo más interno, se trata de un problema hormonal que hace que el cuerpo de unas personas y el de otras huela de una manera u otra, al fin y al cabo somos animales y nuestro olor nos distingue del resto. Sea como sea es importante que sigamos una serie de medidas para evitar oler más y con ello el rechazo que esto supone para muchas personas.
El aseo personal es esencial para mantener a raya el mal olor corporal. Un consejo es utilizar un jabón actibacterias para acabar con los microorganismos que fomentan el mal olor, además de centrarnos en las zonas proclives a fomentar el mal olor, como son las axilas y la parte de los genitales. Muchas personas tienen que asearse más de una vez al día por tener un olor corporal más alto que la media, aunque esto dependerá mucho de la época del año y del grado de actividad de estas personas. Una solución para mejorar este mal olor es eliminar el vello de estas partes para evitar la acumulación de bacterias que a la larga son las que causan el mal olor.
La ropa es otro punto fundamental a tener en cuenta, y es que utilizar ropa limpia a diario es esencial para evitar que el mal olor se acumule, ya que aunque una persona esté aseada, si su ropa huele mal el olor se incrementará al entrar en contacto con el cuerpo. Lo mismo sucede con los materiales con los que esté realizada esa ropa, ya que deben ser fibras naturales, aunque en el mercado existen en la actualidad muchas fibras especialmente ideadas para evitar la sudoración excesiva y mejorar de este modo nuestro estado en lo que a olor corporal se refiere.
La alimentación es importante cuidarla, ya que hay sustancias que aumentan el olor corporal, ya que permanecen en el cuerpo y potencian el mal olor a través de la sudoración. Algunos ejemplos son los extractos de proteínas, aceites de algunos alimentos como el pescado, la cebolla o el ajo, al igual que algunas hierbas aromáticas con un fuerte aroma como el curry o el comino. Es mejor seguir una dieta más ligera en la que los vegetales tengan un lugar importante, ya que nos ayudarán a depurar el organismo y ayudarnos a disminuir el mal olor corporal.
Estas son algunas recomendaciones generales, pero existen otras soluciones como el uso de desodorantes especiales que evitan y frenen la traspiración del cuerpo, así como geles de baño especiales para evitar el exceso de sudor. En casos extremos se puede recurrir a un especialista que nos ayudará a solucionar el problema y evitar los problemas que puede llegar a traernos.