En las personas físicamente activas, la hidratación tiene gran importancia, pues una pérdida de agua corporal significativa implica bajas en el rendimiento, así como mayor riesgo de lesiones y otro tipo de accidentes. Por eso, es importante saber si estamos o no bien hidratados.
Una sencilla manera para saber si estamos en equilibrio hídrico, es decir, si lo que ingerimos cubre las pérdidas por sudor y demás, es controlar el peso corporal. La prueba consiste en pesarse durante 3 días seguidos en ayunas, a primera hora de la mañana, y observar los cambios de peso.
Si el peso no varía en los 3 días o si las modificaciones en el mismo son inferiores al 1% del peso corporal, significa que estamos bien hidratados, es decir, que suplimos las pérdidas de agua con nuestro consumo. De lo contrario, es momento de beber más líquidos si el peso se reduce drásticamente o si aumenta, puede existir retención de líquidos por muchas causas, algo importante en la mujer, unos pocos días antes del comienzo de su período menstrual.
Además, existen algunas condiciones que pueden llevarnos a retener líquidos, por lo tanto, si la tendencia en el aumento de peso continúa día tras día, es recomendable consultar con un médico.
Por otro lado, nunca conviene beber agua en exceso, pues la hemodilución que ésto puede provocar resulta verdaderamente grave. Asimismo, beber cantidades insuficientes puede desencadenar una riesgosa deshidratación, por eso, lo ideal es estimar las pérdidas de líquidos tras el ejercicio, mediante el peso corporal, y reponer las mismas bebiendo agua.
Es difícil encontrar un equilibrio hidrico adecuado, pero con sencillos parámetros como el control del peso corporal podemos aproximarnos al mismo.
Vía | Recomendaciones de bebida e hidratación para la población española En Vitónica | Algunos consejos para mantener una buena hidratación En Vitónica | Calcula el agua que necesitas después de entrenar Imagen | Let Ideas Compete