Cuando trabajáis con pesas o mancuernas ¿utilizáis guantes? Yo era de esas que pensaba que es mejor sentir el agarre con las manos desnudas… hasta que me empecé a hacer daño de verdad. Desde entonces me di cuenta de lo importante que es cuidar tus manos al entrenar con pesas.
Una cosa es sentir el agarre y otra muy distinta tener las manos destrozadas: durezas, pellejitos… Además de molestos, personalmente los considero un poco antiestéticos, al menos en una chica. Sé que muchos me diréis que son señal de que se trabaja y estoy de acuerdo, pero bonito no queda, no nos engañemos. ¿Sabéis cómo prevenir las durezas y cómo curarlas? Os explico cómo proteger vuestras manos durante el entrenamiento.
El factor clave, como siempre, es la prevención. Unos buenos guantes, con almohadilla en las bases de los dedos y en las palmas, nos ayudarán a proteger nuestras manos. Además, últimamente se ha avanzado mucho en el tema de accesorios para el deporte, y podemos encontrar guantes de materiales transpirables, finos y cómodos que no nos hagan sentir como si lleváramos guantes de esquí.
Lo más importante a la hora de elegir unos guantes es que sean de un material flexible y transpirable, que se adapte perfectamente a nuestra mano. También es importante que los mantengamos en perfecto estado: lavadlos adecuadamente y dejadlos secar al aire. Unos guantes para entrenar nos pueden durar mucho tiempo, así que no debería importarnos hacer una pequeña inversión para proteger nuestras manos, que en el gimnasio son nuestras herramientas de trabajo.
Si voy a realizar ejercicios con mancuernas, como aperturas de pecho o press de hombro, suelo utilizar vendas de boxeo que, además de proteger mis manos me permiten sujetar las muñecas: tengo varios esguinces mal curados, y las vendas me proporcionan una seguridad que no tengo con los guantes. Valen igual que los guantes siempre que sepamos colocarlas y las mantengamos limpias y secas.
Si vamos a realizar ejercicios con mucho peso o a colgarnos para hacer dominadas otra buena opción es el uso de esponjas. Personalmente, yo no las utilizo porque no muevo mucho peso, pero conozco gente que sí y les va bastante bien. Nos valen esponjas normales, pero al igual que con los guantes recordad mantenerlas en perfecto estado.
Después del entrenamiento, durante nuestra merecida ducha, lavad bien las manos con agua y jabón para evitar la proliferación de gérmenes. Secaos bien, sobre todo entre los dedos, y aplicad una crema hidratante. En principio cualquier loción nos vale, pero según mi experiencia las cremas de manos con aloe vera son especialmente buenas.
Una vez a la semana, que puede coincidir con nuestro descanso del gimnasio, podemos realizar un peeling en las manos. Simplemente sumergidlas en agua templada durante unos minutos y, una vez la piel se haya reblandecido, eliminad las células muertas con una piedra pómez o un guante crin. Secaos bien las manos y aplicad una crema.
La cuestión es que si cuidamos todo nuestro cuerpo, ¿por qué no cuidamos igual nuestras manos? ¿Qué hacéis vosotros para mantener las manos cuidadas?
En Vitónica | En el gimnasio ¿entrenar con guantes o sin guantes?