Solemos pensar en las bacterias como en algo negativo que nos hace enfermar, pero esa es una visión muy sesgada de estos seres vivos microscópicos que se encuentran dentro de nuestro organismo de forma natural y nos ayudan a realizar algunos procesos habituales necesarios para la salud.
De hecho, una microbiota, entendida como la masa de bacterias que vive de forma habitual en nuestro intestino, en buena forma, variada y equilibrada, está relacionada con un mejor estado de salud no solo digestivo, sino también mental, según se ha determinado en algunos estudios.
Para ello conviene seguir una alimentación saludable e incluir en ella alimentos probióticos, que son aquellos fermentados gracias a la acción de las bacterias como los yogures. Estas son algunas de las bacterias beneficiosas que se pueden encontrar en esos alimentos.
Lactobacillus acidophilus y otros lactobacilos
Existen hasta 80 especies diferentes dentro del género de los Lactobacilos. Uno de ellos, el más común, es el Lactobacillus acidophilus, o L. Acidophilus.
En el intestino, los lactobacilos contribuyen a la digestión y general ácido láctico y peróxido de hidrógeno, que a su vez impiden que proliferen otras bacterias que sí pueden resultar perjudiciales para la salud. Además, se considera un posible tratamiento para prevenir la diarrea asociada al uso de antibióticos y para las infecciones bacterianas vaginales.
Una forma de favorecer la presencia de lactobacilos en nuestro organismo es consumir yogures y otros productos lácteos ricos en este microorganismo.
Bifidobacterium bifidum y breve
La presencia de una bacteria llamada Helicobacter pylori en el estómago puede aumentar el riesgo de sufrir úlceras estomacales, pero algunos estudios utilizando ratones han demostrado que algunas cepas de Bifidobacterium bifidum pueden ayudar a reparar esas úlceras.
Otra bacteria del mismo género, Bifidobacterium breve puede resultar útil en el tratamiento de estreñimiento infantil, de la diarrea causada por una infección de rotavirus y el Síndrome del Intestino Irritable.
Según una investigación presentada en la reunión de la American Chemistry Society, las bifidobacterias podrían ser precisamente la razón por la que el chocolate negro en dosis moderadas es beneficioso para la salud.
Streptococcus thermophilus y salivarius
El Streptococcus thermophilus es una de las bacterias implicadas en las reacciones que hacen falta para fabricar yogures, quesos y otros productos lácteos fermentados.
Uno de sus principales usos terapéuticos es el alivio de calambres, diarreas y otras molestias gastrointestinales asociadas con la intolerancia a la lactosa.
Dentro del mismo género, el Streptococcus salivarius podría servir para reducir las molestias de la halitosis o el mal aliento.
Imágenes | Pixabay y Wikipedia
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