Las verduras y hortalizas deben formar una parte importante de nuestra alimentación; quizás incluso deberían ser más importantes que los cereales, a pesar de la insistencia de las pirámides nutricionales. Hay muchas maneras de incluirlas en nuestros platos, pero una de ellas se está poniendo muy de moda últimamente: los zoodles o espaguetis de verduras, ¿los conoces?
La palabra zoodles proviene de una mezcla de inglés e italiano: zucchini noodles o fideos de calabacín. Últimamente se han hecho muy famosos a través de las redes sociales, sobre todo instagram donde podemos encontrar más de 100.000 imágenes con esta etiqueta. Os hablamos de esta nueva forma de comer verduras y os damos algunas ideas para hacer en casa.
Los zoodles pueden formar parte de una dieta sana y saludable, ya que aportan sabor y variedad a nuestros platos. Muchos predican sus bondades a la hora de perder peso: obviamente si reemplazamos los espaguetis tradicionales, mucho más calóricos, por estos zoodles realizados con hortalizas, estaremos consumiendo menos calorías al final del día, y el balance calórico será negativo. ¿Ocurriría lo mismo si reemplazáramos los espaguetis de pasta por otro plato de hortalizas y verduras? Pues sí, pero si se busca un plato estéticamente parecido, los zoodles son una buena opción.
Para hacer zoodles solamente necesitas una maquinita llamada "espiralizador" (cuestan desde 20 euros las más sencillas a 40 las más complejas) y las hortalizas de tu elección. Generalmente se utilizan calabacines, zanahorias y remolachas, pepinos y pimientos pero siempre está bien innovar. También se puede utilizar un pelador o una mandolina para cortar las hortalizas, aunque en este caso el resultado sería más parecido al de lon linguine o tallarines.
Algunas recetas con zoodles
Podemos comer los zoodles en crudo o hervirlos ligeramente. A continuación, tres ideas para crear platos sanos y resultones:
Zoodles de calabacín con pesto de espinacas: para esta receta utilizaremos los zoodles de calbacín (cortados con el espiralizador, la mandolina o el pelador) crudos. Lo interesante es el pesto de espinacas, para el que necesitaremos una batidora de mano: echamos en el recipiente de la batidora 100 gramos de espinacas, un diente de ajo, 50 gramos de piñones, 80 mililitros de aceite de oliva, sal y pimienta al gusto y trituramos. Servimos los zoodles con dos cucharaditas del pesto sobre ellos y listo.
Zoodles de zanahoria con guacamole: los zoodles de zanahoria sí los suelo cocer un poco para que queden más tiernos; con un par de minutos en agua hirviendo es suficiente. Para el guacamole necesitaremos un aguacate, un poco de zumo de limón o lima, un cuarto de pimiento verde, medio tomate cortado a dados, un manojo de cilantro y una cebolleta (podéis añadir chile jalapeño si os gusta el picante). Se puede hacer pasando todos los ingredientes por un mortero o bien con una batidora. Servir los zoodles templados y el guacamole fresquito.
Zoodles de calabacín con pollo al wok: preparamos los zoodles de calabacín y los dejamos drenando en un colador para que pierdan el agua (es importante, si no saltarán mucho en el wok). Mientras drenan preparamos una pechuga de pollo en dados, un pimiento verde y una rojo a tiras, y un tomate a dados. Ponemos el wok a calentar y, cuando esté caliente, hacemos los dados de pechuga de pollo. Cuando esté listo lo retiramos. Después pasamos los zoodles, los pimientos y el tomate durante un par de minutos, y finalmente agregamos durante un minuto más el pollo para que se integre. Voilà! Plato caliente de zoodles.
Animaos a probar estas recetas u otras que se os ocurran. ¡Una buena manera de incorporar más verduras a tu alimentación!
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