Unas tortitas saladas cocinadas en el horno es una manera fácil y versátil de sumar proteínas y verduras a nuestra dieta cuando buscamos una manera distinta de dar variedad a nuestros menús. También es una alternativa que suele gustar a los niños y a los menos aficionados a las verduras, o si sospechamos que nos cuesta alcanzar las cantidades de proteínas óptimas en nuestra dieta.
Hemos usado esta receta de Der Foodblog como inspiración modificando apenas algunos ingredientes; es fácil variar el tipo o cantidad de vegetales y se pueden añadir otros aderezos al gusto. Si se hacen más pequeñas y finas quedarán más crujientes, pero si se hacen algo más gruesas salen jugosas por dentro.
Ingredientes
- Zanahoria (u otra verdura: pimiento rojo o verde, calabaza, nabo, brócoli...) 60 g
- Calabacín (u otra verdura: pimiento rojo o verde, calabaza, nabo, brócoli...) 40 g
- Huevos L 1
- Queso cottage escurrido 200 g
- Queso rallado tipo mozzarella o queso tierno 40 g
- Harina de avena 30 g
- Hierbas provenzales al gusto
- Pimentón dulce o picante
- Pimienta negra al gusto
- Sal al gusto
Cómo hacer tortitas saladas de verduras
- Tiempo total 30 m
- Elaboración 10 m
- Cocción 20 m
Precalentar el horno a 200 ºC con aire. Preparar las verduras al gusto hasta juntar unos 90-100 g, picándolas finas o rallándolas, procurando que no suelten mucho líquido. Disponer en un recipiente amplio y añadir todos los demás ingredientes, mezclando hasta tener una masa homogénea.
Corregir el punto de aderezo o de harina de avena si viéramos que la masa es muy líquida, pero debe quedar húmeda, sin desmoronarse. Repartir porciones con una cuchara grande o cuchara de helados en una bandeja con papel antiadherente, aplastándolas con una espátula si se quieren más finas y crujientes.
Hornear hasta que estén bien doradas, unos 20 minutos. Si se desea, gratinar un minuto con el gratinador del horno subiendo el nivel de la bandeja, vigilando que no se quemen.
Con qué acompañar las tortitas saladas de verduras
Según el número y tamaño de raciones que nos sirvamos, estas tortitas saladas pueden ser aperitivo, primer plato o parte de un plato combinado completo. Las podemos acompañar de mayonesa proteica casera, guacamole o algún otro aderezo saludable, o tomarlas con tomate de temporada, una cama de hojas verdes, ensalada de alubias, etc. También serían buena guarnición de carnes o pescados a la plancha si queremos aún más proteínas en el plato.
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