Los altos niveles de vitamina D no sólo protegen los huesos, sino también nos aleja del cáncer

Entre todas las vitaminas que podemos sumar a la dieta, la vitamina D es una de las más conocidas por su papel en la conservación de huesos y dientes sanos. Sin embargo, los altos niveles de vitamina D no sólo protege la salud ósea sino también nos aleja del cáncer.

A más vitamina D, menos riesgo de cáncer

Aunque no es la primera vez que esta vitamina se asocia a menor incidencia de cáncer, un estudio publicado en BMJ fue el primero en evaluar por 16 años a más de 30 mil personas y encontrar relación entre altos niveles de vitamina D y menor incidencia de cáncer.

Concretamente, el estudio fue realizado en Japón y después de  considerar factores que pueden influir en el desarrollo de cáncer tales  como peso, dieta, actividad física, tabaquismo y otros, concluyó niveles altos de vitamina D se vinculan con un riesgo hasta un 20% inferior de sufrir cáncer de cualquier tipo, tanto en hombres como en mujeres.

Sin embargo, se encontró un vínculo mayor entre niveles altos de vitamina D y menor incidencia de cáncer de hígado, mientras que no se encontró asociación con cáncer de pulmón o de próstata.

El mecanismo por el cual la vitamina D podría reducir el riesgo de sufrir cáncer de diferentes tipos aun no está especificado, pero puede deberse a los muchos efectos positivos de sus niveles adecuados como buena salud ósea, mejor salud muscular, sistema de defensas adecuados, entre otros.

Para garantizarnos suficiente vitamina D es importante acudir a alimentos fuentes, sobre todo en invierno, y también exponernos al sol siempre que sea posible, aunque sea 15 minutos tres veces por semana para que la vitamina se sintetice en nuestra piel.

Este artículo fue originalmente publicado por Gabriela Gottau en marzo de 2018 y ha sido revisado para su republicación.

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