En verano la principal fuente de vitamina D de nuestro organismo es la exposición a la luz solar que estimula su síntesis en nuestra piel, pero en otoño, cuando tenemos menos horas de sol y la ropa cubre en mayor medida nuestra piel, debemos obtener vitamina D de los alimentos.
Para que esta vitamina no falte, te aconsejamos el consumo de los siguientes alimentos para obtener vitamina D y prevenir su déficit en el organismo:
Arenque: es una fuente concentrada de vitamina D y en el podemos encontrar hasta 25 microgramos de este micronutriente en 100 gramos de alimento.
Salmón: el salmón es uno de los pescados más ricos en vitamina D ya que contiene alrededor de 9 microgramos por cada 100 gramos y se aconseja la ingesta de entre 5 y 10 microgramos diarios. Su consumo puede ayudarnos a obtener vitamina D sólo con los alimentos.
Sardinas: le siguen al salmón en orden decreciente de fuente alimentaria de vitamina D, pues contienen alrededor de 8 microgramos por cada 100 gramos de alimento, por ello, esta es una excelente manera de obtener vitamina D en otoño e invierno.
Hígado vacuno: el hígado de vaca posee alrededor de 1.7 microgramos de vitamina D y puede ser una manera alternativa de obtener este micronutriente con los alimentos cuando no tenemos una alta exposición a la luz solar.
Huevo: posee alrededor de 2 microgramos por cada 100 gramos, por lo que 1 sólo huevo nos ofrece un 20% de la recomendación diaria aconsejada.
Los alimentos en general no son grandes fuentes de vitamina D pero los antes dichos pueden ayudarnos a suplir la vitamina D que nos ofrece el sol en una época del año donde la exposición a la luz solar se reduce. En otoño, no descuides la ingesta de vitamina D y consúmela incorporando los alimentos antes dichos.
Imagen | Andrea Pokrzywinski