Hoy en nuestra serie de historias de superación queremos hacer un paréntesis para dar nuestro pequeño homenaje a Neil Vines, un joven británico de 22 años, instructor de fitness que falleció el pasado mes de mayo.
Y es que la historia de Neil, sí que ha sido una historia de superación durante sus tres últimos años, una historia de la que se sentía orgulloso y que él mismo quería contar. Por eso hoy, desde Vitónica, os hacemos partícipes a todos vosotros también.
Antes de nada, queremos aclarar que además de querer hacer nuestro pequeño homenaje a Neil, hoy recordamos detalles de su historia , porque él mismo quería compartirla con todos nosotros, mostrando su lucha a través de las redes sociales.
Lo que contamos hoy, son declaraciones suyas y de sus familiares, así como fotografías que él mismo compartió en su twitter , haciéndolo siempre con el mayor de nuestros respetos.
Su historia
El desafortunado giro que dio la vida de Neil Vines, comenzó hace tres años, en agosto del 2012, cuando él tenía 19. En esa época Neil se encontraba entrenando en la isla de Creta, y fue allí donde todo empezó.
Según cuenta su hermana Sarah: "El comenzó a experimentar fuertes dolores de cabeza, cuello y hombro”, acto seguido Neil se desplomó y tuvo que ser llevado de vuelta a casa, donde se le diagnosticó un meduloblastoma (cáncer en la cabeza de rápido crecimiento), que se le extendió rápidamente por la columna vertebral.
Con el paso del tiempo y según iba avanzando el cáncer , Neil perdió parte de la vista y dejo de andar. Según su hermana declaraba al diario DalyMail: "Neil nunca se rindió y siguió siendo positivo hasta el final”, “Él nunca quiso usar una peluca, nunca se avergonzó por salir en su silla de ruedas”. “Fue casi lo contrario, quiso salir para mostrar a los demás que no le importaba lo que padecía”.
Su cambio físico
Como la propia hermana de Neil contaba, él nunca se avergonzó de su apariencia, consecuencia de varias operaciones y de la fuerte quimioterapia y radioterapía que recibía, e incluso no le importaba sacarse fotos mostrando el gran cambio que dio su físico.
En el año 2013 a Neil por fin le dieron el alta, y gracias a su fuerza interior y su superación, volvió a caminar, a andar en bicicleta e incluso a correr. Pero Neil iba a volver a recibir un duro golpe.
Tan sólo 7 meses después, al finales del 2013, al joven le dieron la peor noticia que podía recibir. Había aparecido un segundo tumor en su tronco cerebral.
Para un deportista nato, aspirante a las Olimpiadas, la vida no podía pasar de largo de ese modo, y fue ahí donde Neil, a sabiendas de estar en su recta final, quiso alcanzar sus sueños y sus metas.
Culminó las 600 millas de la carrera de John O'Groats (en una bicicleta especial); paso a paso, completó el Desafío de los Tres Picos (subiendo el equivalente de Ben Nevis, Snowdon y Scafell Pike) e intentó lograr su último reto, subir el equivalente del Monte Everest, sueño que no pudo completar, al sufrir una fractura en la columna vertebral a las puertas de concluir la prueba.
Nuestro homenaje a Neil Venis
El pasado 20 de abril nuestro instructor de fitness perdió la batalla, aunque no podemos decir que la perdiera completamente, porque nos ha dejado una de las mayores historias de superación y de pasión por el deporte que podíamos contar, una historia digna de compartir.
Por eso hoy desde Vitónica, nuestro homenaje y reconocimiento a Neil Vines, un luchador y apasionado del fitness, que nos ha demostrado que la fuerza sobrehumana existe.
Imágenes | twitter Neil Vines, Neil Vines.com
Fuente bibliográfica | Diario DailyMail, web oficial Neil Vines
Ver todos los comentarios en https://www.vitonica.com
VER 3 Comentarios