Nuestro cuerpo es una herramienta que utilizamos a lo largo del día en numerosas ocasiones, ya que a la hora de desplazarnos, ir a trabajar, comer, reír, hablar… utilizamos nuestro cuerpo y los músculos que lo componen. El cuerpo es algo que utilizamos en todo momento, un conjunto de músculos y una red perfecta de partes entrelazadas que necesitan de una determinada energía y forma física para poder funcionar. Por esto en este post queremos ver cómo influye la forma física a la hora de rendir con nuestro cuerpo.
Seguro que en más de una ocasión hemos escuchado a personas que no hacen deporte que no lo realizan porque no tienen fuerzas para hacerlo después de trabajar, ya que llegan a su casa exhaustos. Este es un argumento muy habitual, pero tiene una sencilla explicación. No es que esa persona esté excesivamente cansada de su trabajo, sino que no tiene la forma física adecuada para poder hacer frente a las obligaciones cotidianas.
En anteriores post hemos visto como es necesario el ejercicio físico para mantener una correcta salud corporal. Pero no solo la salud es lo que está en juego cuando realizamos deporte, sino que además lo está nuestra forma física y el aguante y resistencia que nuestro cuerpo va a tener a los diferentes obstáculos que se nos van a presentar día a día y que son los que nos obligan a tener un cuerpo que responda perfectamente a las necesidades de nuestra vida.
El deporte es una actividad que nos ayudará a mantener nuestro cuerpo activo. La mayoría de nosotros trabajamos, hacemos las cosas de la casa y estamos todo el día sin parar. Esto hace que muchas veces no tengamos ni tiempo para entrenar nuestro cuerpo. Pero en la gran mayoría de los casos no es el tiempo, sino el cansancio que tenemos lo que nos impide acudir a practicar deporte. Esto es una especie de pescadilla que se muerde la cola, ya que la energía para afrontar las actividades cotidianas está muy relacionada con nuestro estado físico.
Trabajar, limpiar nuestra casa, desplazarnos y demás, requiere de una respuesta por parte de nuestro cuerpo, esta respuesta la darán los músculos y la capacidad del organismo en lo que a resistencia se refiere. Por este motivo es necesario que siempre mantengamos unos músculos en perfectas condiciones, tonificados y fuertes para poder hacer frente a las actividades que se nos ofrecen a diario. Esto también lo debemos aplicar a órganos como pulmones o sistema circulatorio, que deberán estar siempre en perfectas condiciones.
¿Cuánto deporte es suficiente para estar en forma?
Para poder aguantar toda la jornada será necesario que tengamos el cuerpo a punto, y la única manera de conseguirlo es a través del deporte y la actividad física. Por ello al principio no nos encontraremos con fuerzas para acudir, pero debemos obligarnos a realizar deporte para así poco a poco notar que nuestro cuerpo responde a las necesidades de nuestro día a día, haciendo que cada vez nos se a más sencillo acudir a realizar deporte, pues nuestros músculos estarán en plena forma y responderán mucho mejor.
No es necesario tampoco que destinemos mucho tiempo a ponernos a punto. Si lo que queremos simplemente es estar en nuestra forma física para tener fuerzas suficientes para afrontar el día a día, nos servirá con dedicar tres días a realizar durante media hora mínimo, ejercicio aeróbico que puede ser carrera, bicicleta, caminata rápida, subir escaleras, baile, spinning… A esto debemos sumarle como mínimo dos días de entrenamiento con pesas. Cada sesión con pesas debe ser como mínimo de quince minutos y tiene que englobar todas las partes del cuerpo.
Esto sería lo mínimo recomendable si queremos conseguir una buena forma física, pero si por el contrario lo que buscamos son resultados mayores de desarrollo muscular y marcas mejores es necesario que le dediquemos más tiempo. A pesar de todo debemos tener muy presente que para conseguir una forma física y no llegar al final del día sin fuerzas, es necesario antes cansarnos haciendo deporte para después notar una mejoría sorprendente.
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