En verano el calor nos obliga a llevarnos a la boca infinidad de bebidas refrescantes que nos harán paliar mucho mejor el calor que hace en el exterior y que es el culpable de que pasemos sed. El agua es el líquido que más nos refresca y nos hace mantener una correcta hidratación cuando el calor más aprieta. A pesar de esto, siempre solemos echar mano de refrescos que además de paliar la sed lo que hacen es dar sabor a nuestro verano. Uno de los que más consumimos es el tinto de verano, y por ello queremos detenernos en él.
El tinto de verano es una de las bebidas estrella del verano, y es que en todas las terrazas lo podemos ver y degustar. Se trata de una mezcla de vino tinto y gaseosa que nos ayudará a recuperar líquidos cuando el calor más aprieta. Es cierto que se trata de una bebida con alcohol, por lo que no hay que abusar de ella, sino que puede ser un buen acompañante en las comidas o los aperitivos, y por ello es necesario que sepamos lo que nos aporta su ingesta.
El vino tinto
Para saber mejor en qué consiste en tinto de verano vamos a detenernos en sus ingredientes, y es que ante todo hay que resaltar el vino tinto, la materia prima con la que se elabora este preparado veraniego. En anteriores ocasiones nos hemos hecho eco de los beneficios que el vino tinto tiene para la salud. Hay que recordar que es una bebida elaborada a partir de la uva, una fruta cargada de antioxidantes que ayudan al organismo a la hora de protegerse del ataque de los radicales libres.
El vino tinto es un compendio de antioxidantes que nos ayudarán a mantener las células jóvenes por más tiempo, además de ayudarnos a prevenir enfermedades provocadas por la oxidación de las mismas con el paso del tiempo. A esto debemos sumar una sustancia que contiene el vino tinto, y que es precisamente la que le da ese color característico, los taninos, un potente protector celular que sirve de prevención frente a enfermedades cardiacas y circulatorias, además de ayudarnos a mantener una mejor salud general.
Es cierto que el contenido en alcohol es lo menos recomendable del vino, por ello no podemos abusar de su ingesta, bien sea solo o en preparado como el tinto de verano, aunque es cierto que el tinto tiene menos alcohol al estar rebajado el vino tinto con gaseosa. A pesar de todo hay que tener cuidado con su abuso por el daño que puede provocar el exceso de alcohol en el organismo.
La gaseosa
Como segundo ingrediente tenemos la gaseosa. La gaseosa es una bebida carbonatada a la que siempre se le han atribuido una serie de propiedades digestivas. Normalmente se utiliza esta bebida como acompañante de otras a la hora de rebajar sus niveles de alcohol, como en el caso del tinto de verano, o para darle un sabor diferente en el que el gas es la nota predominante. Está elaborada a partir de agua mineral mezclada con otras sustancias que dan ese sabor especial de la gaseosa.
La gaseosa es una bebida dulce, pero no contiene azúcar, ya que está elaborada a partir de edulcorantes, por lo que al añadirla al vino tinto lo que conseguimos no es solo rebajar los grados de alcohol que contiene esta bebida, sino que además disminuirá el contenido calórico del vino. Por ello el tinto de verano se convertirá en una bebida con muchas menos calorías que cualquier otra opción con más alcohol. A esto hay que sumar el poder hidratante y refrescante que tiene debido a la gaseosa que le añadimos.
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