Todos los errores que no cometer en tu alimentación después de la Navidad si buscas adelgazar

Pasadas las navidades, mucha gente que ha hecho de estas fechas una excusa para comer como ha querido, una de sus prioridades será bajar los kilos que han ganado. ¿Cómo? Fácil, ahora los vendehumos publicitarán dietas milagro (como la famosa detox) para que la gente que quiera perder la grasa corporal acumulada gaste su dinero pensando que volverán a recuperar su composición corporal con la misma facilidad y rapidez que la perdieron.

Otras personas comerán muy poco pensando que es la manera más eficiente de volver a como estaban, y otros irán al gimnasio 2 o 3 horas al día, haciendo cardio o machacándose en los hierros levantando pesos que van más allá de sus límites, facilitando las lesiones y favoreciendo el retraso de la vuelta a su composición corporal. Por tanto, ¿cómo debemos afrontar la vuelta a nuestro anterior índice de grasa?

No comas poco

Uno de los principales errores cuando se acaban este tipo de fiestas, es realizar un déficit agresivo con el fin de perder cuanto antes los kilos que hemos subido (aunque no todo sea grasa). Lo mejor es realizar un déficit moderado incluyendo los alimentos que más nos gustes para que exista adherencia.

Para ello, lo primero es saber cuantas kcal estamos gastando actualmente, y a partir de ahí, restar entre 200-400 kcal para que nos mantengamos en un déficit energético que nos permita utilizar las reservas de grasa como fuente de energía. De nada sirve mantenernos en un déficit de 1000 o más kcal ya que ni es saludable ni podemos alargarlo más de una semana sin volvernos locos. Por tanto, un déficit como del que he hablado antes, estaría bien.

No te alimentes a base de batidos

Este es otro error que suele cometer la gente, realizar dietas con apellidos (dieta de la piña, dieta del brócoli...) o realizar dietas a base de batidos pensando que nos va a depurar.

Esto para nada es así, quienes se encargan de "depurarnos" son nuestros riñones e hígado, por lo que realizar ese tipo de dietas con ese fin, es un sinsentido.

Realizar esa dieta a base de batidos, no solo no sirve para depurarnos, sino que también puede generar daños en nuestra salud porque la mayor parte de los ingredientes son de muy baja calidad y cargados de azúcar.

¿Por qué funcionan entonces? Porque sencillamente, aunque los ingredientes sean malos, generan un déficit calórico.

Otro de los inconvenientes es su baja capacidad saciante, por lo que, aunque podamos alimentarnos así unos pocos días, no es posible hacerlo de manera continuada sin que tengamos una ansiedad crónica por la comida.

No reduzcas tus carbohidratos a cero

Si eres una persona que quiere realizar deporte o que, por el contrario, ya lo está haciendo, bajar mucho los carbohidratos al día puede ser problemático porque a la hora de ir a entrenar, nos vamos a sentir muy cansados y sin ganas.

Esto es un problema porque, si de normal cuesta empezar a realizar deporte, imaginad si tenemos que hacerlo si nos sentimos cansados. Además, no podremos rendir bien, por lo que gastaremos menos kcal mientras hacemos ejercicio, dificultando la pérdida de grasa y aumentando el riesgo de lesión.

No quites de tu dieta las frutas

Uno de los miedos que suele tener la gente es el azúcar de las frutas. Un alimento se compone de algo más que uno de sus nutrientes. En este caso, la fruta también es agua, fibra, micronutrientes, fitonutrientes, etc, por lo que además de ser muy saludables, también son muy saciantes, por lo que nos van a ayudar muchísimo a seguir el plan nutricional que llevemos.

Además, gracias a su alto contenido en nutrientes, nos permitirán recuperarnos antes de los entrenamientos y poder entrenar más veces por semana o aplicar mayor intensidad a estos (aunque todo con cabeza).

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