La ansiedad es una emoción muy compleja. El punto de inicio para afrontarla es comprenderla
Mihály Csíkszentmihályi escribió a principios de la década de 1990 "Fluir (Flow): Una psicología de la felicidad" sin saber que se convertiría en una obra de arte. Este libro ha sido reeditado y todo amante de las lecturas de crecimiento personal lo ha leído o al menos ha escuchado sobre él. En estos días ha vuelto a ser tendencia por el estreno de Inside Out 2, la segunda parte de esta película llena de emociones. En este artículo no haremos ningún spoiler más allá de lo que puede verse en el tráiler oficial de esta película que, como su nombre en español, a muchos pondrá "Del Revés".
La película que nos pone "Del Revés" con la ansiedad como protagonista
Alegría, tristeza, ira, miedo y asco eran las emociones que controlaban a la Riley Andersen niña en la primera parte de Inside Out. Sin embargo, varias emociones nuevas entran en juego en la nueva película con una Riley adolescente: ansiedad, envidia, ennui (mezcla de aburrimiento y desgana) y vergüenza.
Las nuevas emociones convivirán con las antiguas, siendo la ansiedad la nueva protagonista. Como dirían en el programa "Un, dos, tres", hasta aquí puedo leer. De aquí en adelante hablaremos de la ansiedad, de su importancia a nivel mundial y de cómo 'el canal del flujo' que ideó Mihály Csíkszentmihályi puede ayudarnos a reducirla.
El canal del flujo de Mihály Csíkszentmihályi
Csíkszentmihályi explica en su libro que existe un canal en el que nos sentiremos en 'modo flow', un estado de inmersión total con lo que hacemos que nos hace perder la noción del tiempo y olvidarnos de todo lo demás. Seguro que alguna vez has fluido en esa zona en la que disfrutabas con algo, ya sea trabajando, en un concierto o desconectando con cualquier cosa.
Mihály pone en el eje horizontal las habilidades que tenemos hacia algo y en el eje vertical los desafíos a los que nos encontramos. Cuando tenemos poca habilidad, pero el desafío es fácil, estamos dentro del canal de flujo, es decir, podemos sentirnos genial con lo que hacemos.
A medida que aumenta la dificultad del desafío, nuestras habilidades han de ser mayores para seguir dentro de ese canal de flujo. Si el reto y las habilidades crecen a la vez, estaremos siempre con esa sensación de disfrutar lo que hacemos. Esto puede utilizarse en todos los ámbitos:
- Tocar un instrumento: si nos piden tocar una obra de Mozart al piano en nuestro primer día el desafío extremadamente más elevado que las habilidades, así que no estaremos fluyendo. La ansiedad entrará en escena.
- Aprender un idioma: si hemos estado viviendo en Londres un año y tomamos clases de inglés para perfeccionar el lenguaje, pero nos enseñan los colores y números, nuestras habilidades serán mucho mayores que el desafío. El aburrimiento entrará en escena.
- Entrenamientos: si un entrenador personal nos pone retos en base a nuestra condición física, que sean exigentes, pero alcanzables, estaremos dentro del canal de flujo. Aquí ni la ansiedad ni el aburrimiento entrarán en escena, sino que estamos disfrutando del entrenamiento.
¿Cómo utilizar el canal del flujo para alejar la ansiedad?
La ansiedad no solamente aparece cuando nos enfrentamos a retos reales, sino también a desafíos imaginarios, que son los más complejos de eliminar. La película de Inside Out 2 enseña a niños y a mayores qué es la ansiedad, qué hace con nosotros y cómo podemos calmarla, pero para conocerlo tendrás que ir al cine a ver la película.
En nuestro día a día debemos intentar afrontar retos en base a nuestras habilidades. Como hemos visto anteriormente, si las habilidades son más grandes que el desafío, nos aburriremos; pero si las habilidades son menores al reto, aparecerá la ansiedad.
El verdadero problema llega cuando no confiamos en nuestras habilidades y creemos que el desafío nos supera, cuando realmente no es así. Aquí entra en juego el síndrome del impostor que nos dice que no somos capaces, cuando estamos más que preparados para algo.
También puede ocurrir lo contrario, y vernos capaces de algo cuando en realidad no lo somos, pero en este caso no hablamos de ansiedad porque no es la emoción que correspondería. En este caso tendremos que ponernos en manos de profesionales que nos ayuden a controlar esa ansiedad creada por algo imaginario, que suele ser la más común.
Situación de la ansiedad en España
En España, un 16% de personas toman somníferos, ansiolíticos o antidepresivos una vez por semana. Según un informe del grupo AXA sobre salud y bienestar mental, el 34% de los encuestados españoles tiene algún problema de salud mental.
Casi 4,5 millones de españoles toman a diario ansiolíticos, casi el doble más de hace una década. Nos cuesta mucho más relajarnos, estamos mucho más estresados y todo ello hace que se haya disparado la ingesta de fármacos como los ansiolíticos.
Sin embargo, tomar estos medicamentos no es más que un parche. Para visualizarlo, es como si aparece una humedad en nuestro techo y lo pintamos. Habremos solucionado el problema, pero tendremos que pintarlo cada semana porque si no volverá a aparecer la mancha de humedad.
La solución real al problema sería que un fontanero analizase la fuga de la tubería, lo arreglase y así tendríamos el problema resuelto de raíz. Tomar pastillas para la ansiedad es pintar el techo, ponerse en manos de profesionales y comprender qué es la ansiedad, es arreglar la tubería y la fuga de agua.
La ansiedad que sí podemos controlar
Hay muchas técnicas de control de la ansiedad, pero no vamos a profundizar en ellas. El objetivo de este artículo es conocer el canal del flujo al que acudir cuando la ansiedad, o el aburrimiento, aparecen en escena. Si te agobias porque no has perdido dos kilos esta semana, pon el foco en que el desafío era demasiado alto y deberías ajustarlo.
Si CrossFit es demasiado para ti, no abandones el ejercicio físico, busca otro tipo de entrenamiento acorde a tus habilidades actuales. Si te aburre hacer el mismo camino andando cada día, prueba a introducir picos de carrera cada cinco minutos para subir el nivel de reto.
Cuanto más en forma estemos y más habilidades sobre algo tengamos aprendidas, más alto puede ser el reto. Si eres principiante y tienes pocas habilidades, enfócate en actividades básicas a tu nivel. Como hemos comentado en varias ocasiones, la ansiedad va más allá de este canal del flujo, ya sea por tener problemas para llegar a final de mes, una subida de hipoteca, problemas con algún familiar, etc.
En esos casos deberemos analizar la situación y ver qué está en nuestra mano y qué no. Si no somos capaces de reducir la ansiedad por nosotros mismos reduciendo el nivel del desafío enfrentado, antes de "pintar la pared" prueba a ponerte en manos de profesionales que te ayuden.
Estará en nuestra mano entrar en modo flujo con todo aquello que podamos controlar, pero no con lo que se escape a nuestras manos. Serán otras manos las que en ese caso tendrán que hacer ese trabajo, o ayudarnos a hacer el nuestro.
Referencias
Csikszentmihalyi, M. (2005). Fluir (flow): Una psicologia de la Felicidad (N. Lopez & N. Lspez, Trads.). Editorial Kairos.
Estudio Internacional de Salud Mental AXA España
En Vitónica | Running o antidepresivos: qué es mejor tomar para tratar la ansiedad y la depresión
Imágenes | Priscilla Du Preez (Unsplash), Solen Feyissa (Unsplash)
Ver todos los comentarios en https://www.vitonica.com
VER 0 Comentario