Un grupo de investigadores pusieron a prueba a ChatGPT para diseñar un programa de entrenamiento, y el resultado te sorprenderá

La fiebre por ChatGPT ya pasó, o eso cree mucha gente. Este tipo de herramientas de Inteligencia Artificial avanzan a pasos agigantados en todo tipo de terrenos, también en la prescripción del entrenamiento. Un grupo de investigadores quiso comprobar la calidad de un programa generado por ChatGPT, y frente a lo que pudiésemos creer, tenía un nivel superior a lo esperado. A lo largo de esta artículo analizamos su estudio, vemos por qué ChatGPT, aunque no es lo mejor, puede ser muy útil, y cerraremos surfeando una ola para que no nos aplaste.

ChatGPT y entrenador: la unión hace la fuerza

GPT son las siglas de Generative Pre-training Transformer, un modelo de lenguaje de OpenAI, inteligencia artificial, que solemos conocer por ChatGPT, que a lo que hace alusión este último término es a las conversaciones que tenemos con GPT. Desde el lanzamiento de su versión gratuita (GPT 3.5) no ha parado de atraer a usuarios que hemos ido descubriendo su espectacularidad.

La versión de pago (GPT 4.0) es aún más completa e incluye tareas de razonamiento avanzado. Con ChatGPT podemos mantener una conversación similar a la que tendríamos con otra persona, pero obteniendo todo tipo de datos y respuestas.

Este tipo de tecnología de Inteligencia Artificial ha llegado para cambiarlo todo, puede que incluso la prescripción de entrenamiento. Actualmente, ChatGPT puede producir prescripciones de entrenamiento, incluidos planes, sugerencias y comentarios sobre el rendimiento basados ​​en información específica.

El problema es que el entrenamiento es un arte, y como la poesía o la pintura, la tecnología GPT puede complementarla, pero difícilmente superarla. Esa es la razón por la que si pides a ChatGPT que te diseñe un programa de entrenamiento puede cometer errores importantes a día de hoy.

La ventaja es que se abre una puerta al acceso de todo el mundo a la prescripción de entrenamiento de cierta calidad, que si bien no será un plan específico ni óptimo, puede ser útil, como este caso en el que un oficinista pidió a ChatGPT motivación para empezar a correr y perdió 12 kilos en tres meses.

Prescripción de entrenamiento por ChatGPT evaluado por la ciencia

Una publicación de marzo de 2024 de la revista Biology of Sport quiso comprobar de manera científica si ChatGPT se alejaba de lo que podía ser un entrenamiento general para personas intermedias y avanzadas en el entrenamiento de pesas. Para ello utilizó la versión 3.5 y 4.0 introduciendo las siguientes características para obtener el programa.

Los investigadores pidieron un programa de entrenamiento de fuerza de 12 semanas para ganar fuerza, enfocado a un hombre de 20 años con un nivel de experiencia intermedio. Hicieron lo mismo para un hombre con nivel avanzado, requiriendo la carga a levantar, el descanso y el tempo de los ejercicios.

Volvieron a pedir lo mismo, pero modificando el género de masculino a femenino. ChatGPT generó información realista para un entrenamiento de fuerza en función de las demandas del usuario, especialmente la versión de pago 4.0. Puedes descargar el programa de 12 semanas generado por ChatGPT en este enlace.

En la siguiente tabla se refleja si las variables, principios y estrategias tenían una asociación débil (weak), media (moderate) o fuerte (strong) con la que recomienda la evidencia científica. 

En contra de lo que pudiésemos pensar, hay asociaciones fuertes en variables como la frecuencia de entrenamiento, intensidad y volumen. El tiempo de descanso, en la versión 3.5 arrojaba valores alejados de los recomendables, ya que la información alojada en internet sobre esta variable es ambigua.

Los principios de entrenamiento también tenían asociaciones medias y fuertes con los que se deben tener en cuenta a la hora de prescribir un entrenamiento de fuerza: hacer cada vez un poco más (sobrecarga progresiva), variación, especificidad y recuperación. ChatGPT generó información de calidad en este apartado también.

En lo que falló en gran medida ChatGPT fue en introducir las últimas actualizaciones en entrenamiento, como pueden ser técnicas avanzadas, ya que lo contemporáneo se escapa aún a esta tecnología. En resumidas cuentas, ChatGPT puede utilizarse como una herramienta complementaria, no como un reemplazo, en la prescripción de fuerza.

Unión humano-máquina para caminar hacia el futuro del entrenamiento

Aunque los entrenadores, y otros tantos oficios de la rama de la salud o cualquier otra sintamos incertidumbre por lo que esta tecnología puede llegar a ser, lo ideal es combinar la experiencia y práctica humana con ChatGPT y cualquier Inteligencia Artificial.

La unión de humano y máquina es el presente y así debemos aceptarlo. ¿Seguiremos de la mano dentro de una década? Eso está por ver, pero herramientas como ChatGPT puede ofrecer información de cierta calidad en circunstancias como la pandemia de COVID-19, en la que mucha gente quería entrenar, pero no sabía cómo hacerlo.

Reflexión humana para surfear la ola

Por supuesto, ni que decir tiene que un entrenador personal que diseñe un programa específico e individual hará que los objetivos se alcancen antes, con menor riesgo de lesión y de manera mucho más precisa. Lo que también está claro es que una gran cantidad de personas teclean "programa para ganar fuerza y músculo" en buscadores como Google.

En esos casos, ya que van a utilizar cualquier tipo de programación que encuentren, mejor que sea de cierta calidad, ¿no? Al igual que hubo empresas que no supieron ver el cambio de lo analógico a lo digital y se quedaron en el camino, no darse cuenta de lo que ya está aquí con herramientas de Inteligencia Artificial como ChatGPT hará que la ola que viene nos aplaste.

Así que únicamente queda la opción de preparar la tabla de surf, entrenar para ello trasteando con ChatGPT y demás IA y surfear la ola con una sonrisa cuando ya la tengamos encima.

Referencias

Puedes descargar el programa de 12 semanas generado por ChatGPT en este enlace.

Washif, J. A., Pagaduan, J., James, C., Dergaa, I., & Beaven, C. M. (2024). Artificial intelligence in sport: Exploring the potential of using ChatGPT in resistance training prescription. Biology of sport, 41(2), 209–220. https://doi.org/10.5114/biolsport.2024.132987

Dergaa, I., Chamari, K., Zmijewski, P., & Ben Saad, H. (2023). From human writing to artificial intelligence generated text: examining the prospects and potential threats of ChatGPT in academic writing. Biology of sport, 40(2), 615–622. https://doi.org/10.5114/biolsport.2023.125623

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