Alimentarse de insectos es muy común en ciertos países del mundo, pero en Europa todavía no lo es, aunque cada vez se está expandiendo por todo el mundo, siendo un alimento del futuro.
En el programa de hoy "¿Te lo vas a comer?" de Alberto Chicote descubre un mercado negro que comercializan insectos ilegales ya que no son aptos para el consumo humano.
Esto nos ha generado cierta curiosidad y es por ello que vamos a aclarar si realmente el consumo de insectos es legal en España y qué beneficios tiene para la salud su consumo.
La legalidad y el consumo de insectos
Es sorprendente saber que hay 1.900 especies de insectos que son perfectamente aptas para el consumo humano y que unas dos mil millones de personas en el mundo ya usan este tipo de animales para nutrirse todos los días. Pero, ¿cómo está la situación en España?
España está regulada por la Ley de Nuevos Alimentos, la cual hay ocho especies de insectos que están permitidos en España para el consumo.
En España de momento no está permitida la venta de insectos a nivel nacional pero se podrá comercializar algunas especies de insectos procedentes de países como Bélgica, Austria, Finlandia, Dinamarca, Reino Unido y Holanda. Esto es porqué aún la regulación nacional no está adaptada para su consumo nacional, por lo que lo tienen que traer del extranjero.
Es muy importante que cuando consumamos insectos estos estén regulados por el Reglamento (UE) 2015/2283 del Parlamento Europeo y del Consejo relativo a nuevos alimentos, ya que significa que el comerciante de este tipo de alimento está sujeto a la normativa vigente, por lo que lo confiere un producto seguro.
Los posibles riesgo de consumir insectos si no están regulados, según la AESAN
Alto riesgo de alergias asociadas a los insectos
Según la AESAN, esto es una cuestión muy preocupante que hay que tener en cuenta ya que muchos insectos contienen alérgenos que provocan una reacción alérgica muy peligrosa al humano.
Riesgos biológicos que ponen en riesgo la salud del consumidor
Los insectos, aunque no tengan muchas enfermedades en común con el ser humano, son vectores de microorganismos que pueden poner en riesgo la salud de la persona, sobre todo si no han sido tratados de forma correcta.
Por lo general, tal y como dice la AESAN la transmisión de enfermedades como las diferentes hepatitis, hongos o bacterias, son bajas, pero requiere más estudio al respecto para eliminar este riesgo.
Riesgos químicos derivados de los residuos agrícolas
Las granjas de insectos deberán estar totalmente aisladas de residuos agrícolas como pesticidas y otras sustancias químicas que se pueden llegar a usar en la ganadería o la agricultura.
Si se usa estas sustancias en la cría de insectos pueden estar expuestos por antimicrobianos y pesticidas que pueden poner en riesgo la salud de la persona.
Beneficios de consumir insectos
Los insectos tienen un alto valor nutritivo
Se sabe que los insectos son una fuente rica en proteínas, que en poca cantidad te puede suplir las necesidades de este macronutriente, pero no solo esto, también son ricos en grasas saludables, como el omega 3, 6 y 9.
Además, son ricos en micronutrientes como el hierro, calcio, magnesio, fósforo, selenio y zinc. Además, son ricos en fibra, haciendo que con poca cantidad te sientas saciado, por lo que pueden ser perfectos para mantener un buen estado físico.
Un alimento que puede ser la solución contra el hambre mundial
Cada vez somos más personas en el mundo y menos animales para sostener el hambre mundial, además con el cambio climático muchas especies se encuentran en peligro de extinción.
El ser humano tiene la capacidad de encontrar soluciones para su supervivencia aunque sea comer otro tipo de animales, en este caso le ha tocado a los insectos, que puede ser una posible solución para poder alimentar las miles de millones de personas que van a habitar este mundo en un futuro.
Es mucho más barato
Los insectos son un animal que gracias a que no necesitan tanto tratamiento y hay en grandes cantidades, va a ser más barato adquirirlos.
Además, que no se requerirá tanto trabajo de ganadería y tendrá además un bajo impacto ambiental, ya que no se usará tantos gases contaminantes de las granjas como el metano o el óxido de nitrato.
Los insectos son una fuente de alimentación más segura
Un reciente estudio de la Universidad de Waganingen ha demostrado que los insectos transmiten menos enfermedades en comparación a la carne de los animales.
Esto es por qué los animales que comúnmente consumimos y los animales tienen enfermedades comunes que se pueden transmitir, a causa de estar cerca el uno del otro del árbol evolutivo.
En cambio, los insectos no tienen tantas enfermedades en común con el humano, por lo que será más seguro consumirlos.
Contribuyen al mantenimiento de los recursos del planeta
El consumo de insectos puede frenar el peligro de extinción de algunas especies, esto es gracias a que no se necesita mucha cantidad de insectos para suplir las necesidades nutricionales básicas y gracias a la gran cantidad de especies de insectos que hay en nuestro mundo.
Las granjas de crianza excesiva de animales dejarían de tener un papel tan protagonista. Además, que en un posible futuro los insectos serán una necesidad, ya que serán tantos los humanos en el planeta tierra que los animales convencionales no suplirán los requerimiento de proteínas necesarios.
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