Muchas veces leemos en prensa o vemos en las noticias que tal alimento es beneficioso para el cáncer, mientras que tal otro puede ser perjudicial, por aumentar el riesgo. Sin embargo hay que tener mucho cuidado con los estudios que relacionan ciertos alimentos con cáncer.
Tanto si la asociación es para decir que es beneficioso o perjudicial, hay que tener precaución con los alimentos que dicen que favorecen o perjudican frente al cáncer, puesto que es habitual que haya estudios a favor y en contra de un mismo alimento.
En un estudio publicado en una prestigiosa revista científica, se eligieron al azar 50 alimentos, para después buscar bibliografía sobre riesgos y beneficios de dichos alimentos frente al cáncer.
El caso es que encontraron, para un mismo alimento, cantidad de estudios que apoyaban el consumo por ser factor protector, mientras que otros estudios lo desaconsejaban, por asociarse a riesgo de enfermedad.
En la mayoría de los estudios, la relación entre el alimento y el cáncer (ya fuera como protector o como factor de riesgo) era bastante dispersa, carente de pruebas sólidas.
Estamos acostumbrados a que nos digan que el vino es saludable con moderación, y a los pocos años nos digan que es perjudicial. O bien el aceite de oliva, la carne, el queso, ciertas verduras…
El caso es que muchas veces se da como cierta información que se basa en estudios que necesitan replicarse y comprobarse para poderse generalizar, y esto pasa tanto en el campo de la alimentación como en muchos otros.
Fuente | bitacoramedica
Imagen | jaclu
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