¿Has leído que no desayunar es tan malo como fumar? Pues no es verdad, y te lo explicamos

Menudo susto esta mañana con algunos titulares de la prensa: "Saltarse el desayuno puede ser casi tan dañino como fumar". Toma ya.

Es que eso asusta a cualquiera, porque tú, que eres una persona que tiene muy claro que fumar es una de las peores cosas que le puedes hacer a tu cuerpo, o bien no lo has hecho nunca, o lo dejaste hace tiempo, o lo estás intentando con todo tu empeño (y si no, no sé a qué esperas), pero vas y te topas con esto y piensas "En fin, todo es inútil, yo a veces no desayuno, así que para eso sigo fumando". ¿Quién no lo pensaría?

Bromas aparte, este titular es una exageración (real) pero ha habido otros que iban por el mismo camino, destacando los resultados de un estudio que parece concluir la importancia para la salud de desayunar bien todos los días.

Titulares sorprendentes porque, de hecho, el de que el desayuno es la comida más importante del día es uno de los mitos alimentarios más extendidos pero es eso, un mito. Nutricionistas expertos llevan tiempo explicando que desayunar es sano si te apetece desayunar, pero que no pasa nada por saltarse el desayuno si la alimentación completa que sigas durante todo el día es equilibrada y sana.

Un estudio transversal es una foto fija

El estudio al que se refieren estos titulares ha sido realizado por investigadores españoles observando a 4.000 trabajadores. Como explica L. Jiménez en su blog Lo que dice la ciencia para adelgazar, hay que empezar señalando que se trata de un estudio transversal, es decir, que los investigadores se han limitado a "tomar una foto" de la situación, sin hacer seguimiento en el tiempo o sin intervenir en la cuestión para medir el efecto de distintas acciones.

Los estudios transversales deben tomarse con cautela precisamente por eso: midiendo variables en un momento concreto sería fácil pensar que tienen más relación entre sí de la que realmente tengan. Recuerda, una vez más: correlación no implica causalidad.

El estudio estableció tres grupos según sus hábitos de desayuno: los que se suelen saltar el desayuno, los que desayunan pocas calorías y los que desayunan abundantemente, y estableció un mayor riesgo de padecer arterioesclerosis en el primer grupo, seguido por el segundo y después por el tercero. Esto parece señalar que, efectivamente, no desayunar conlleva un mayor riesgo para salud, y que hacerlo en abundancia parece mejor que picotear algo y salir corriendo por la puerta.

Ajustando los resultados

Pero las cosas no son tan sencillas. Primero, porque había que ajustar los resultados para asegurarse de que no había otras variables interfiriendo con el resultado. Es algo comúnmente sabido que las personas que no desayunan tienen en general peores hábitos alimenticios y de vida en general, lo cual termina teniendo un efecto negativo sobre su salud que se podría atribuir erróneamente en exclusiva al hecho de que no desayunan.

Tras ajustar los resultados, las conclusiones de los investigadores es que saltarse el desayuno puede servir como indicador de hábitos poco saludables y relacionarse con la presencia de arterioesclerosis. Algo que queda muy lejos de los titulares alarmistas que hemos podido leer hoy, y que desde luego no significa que no desayunar sea tan malo como fumar, ¡que menudo susto!

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