En un mundo de vida rápido, cuando casi no tenemos tiempo para dedicarle a la comida, las ollas de cocción lenta triunfan y te contamos por qué: cocinar con una crock-pot puede ayudarte a mejorar tu alimentación de muchas formas.
Más comida casera y con menos tiempo de cocina
Sumarse al slow cooking parece una odisea en medio de del siglo XXI en el que a todos nos falta tiempo para cocinar. Sin embargo, las ollas de cocción lenta como la Crock-pot triunfan por una sola razón: nos permiten cocinar sin hacerlo realmente.
Es decir, con la crock-pot podemos resolver una comida en muchas horas, pero dedicando minutos a la cocina, pues nos permite meter todos los ingredientes en la olla, programar y salir de casa sin problema para que cuando regresemos a comer esté la comida lista, caliente y muy sabrosa.
Este modelo de cocina desatendida y que además permite ahorrar mucho dinero, es el secreto por el cual triunfan las ollas de cocción lenta en un estilo de vida agitado.
Además, cocinar con crock- pot implica aprovechar todos los jugos de cocción, cocinar al vapor a baja temperatura, no desperdiciando nada y así, obteniendo el máximo provecho de los nutrientes que presentan los alimentos.
Esta es una razón más por la cual la crock- pot permite mejorar nuestra alimentación, pero por sobre todo, porque nos acerca a la comida casera sin complicaciones, de forma sencilla y con el sabor de los platos que elaboraban nuestras abuelas sin que tengamos que estar pendientes de lo que se cocina.
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