Dieta de la pera. Análisis de dietas milagro (XXVII)

Dieta de la pera. Análisis de dietas milagro (XXVII)
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Más qué nunca tras las vacaciones necesitamos ser críticos y no coger cualquier recurso para perder los kilos ganados y retomar la línea. Por eso, hoy realizamos otro análisis de dieta milagro en este caso, colocando bajo la lupa la dieta de la pera.

¿En qué consiste la dieta de la pera?

La dieta de la pera se presenta como una excelente alternativa para desintoxicarnos y depurar el organismo tras las vacaciones. Propone un adelgazamiento de alrededor de 2 a 3 kilos por cada cinco días que se realiza la dieta. Es una propuesta a corto plazo pero con resultados rápidos.

El menú típico de la dieta se conforma de un desayuno a base de una o dos peras frescas sumadas a una infusión sin azúcar. En la merienda se debe consumir un zumo natural de pera y un yogur desnatado. Mientras que en la comida y la cena, se debe consumir una ensalada con trozos de pera y hojas verdes, así como dos peras a modo de postre.

A lo largo del día se propone consumir entre 5 y 6 peras, muchas verduras e infusiones bajas en calorías. La dieta sólo obtiene proteínas de lácteos desnatados y no permite la inclusión de pastas, cereales u otros derivados de harinas.

Se sugiere consultar al médico previo a la realización de esta dieta que sólo se puede realizar por corto tiempo para desintoxicar el organismo, pues puede producir cansancio a causa del bajo aporte proteico.

pera

Se destacan las cualidades de la pera para disminuir el colesterol y controlar la hipertensión arterial. Asimismo, se atribuye a la pera un poder depurativo a causa de su gran aporte de agua y propiedades para mejorar el sistema digestivo.

Errores de la dieta de la pera

La dieta de la pera ronda las 800 Kcal diarias, tiene un bajo aporte de proteínas y escaso o nulo aporte de grasas, pues la mayor parte de las calorías derivan de los hidratos de la pera.

Es una dieta milagro que enaltece a un alimento, es monótona, pobre en nutrientes esenciales y de muy bajo valor calórico, por lo tanto, permite un brusco descenso de peso que claramente puede provocar un efecto rebote posterior.

Asimismo, la dieta puede producir carencias de micronutrientes como el hierro, calcio y ácidos grasos esenciales. Incluso, se prohíben muchos alimentos y el sólo hecho de proponerla como dieta a corto plazo nos indica que no es una propuesta sostenible para modificar hábitos en el tiempo.

Imagen | Nkzs y Ikbenasha

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