Las dietas y la alimentación saludable están, tradicionalmente, rodeada de mitos y rumores. Uno de los más habituales sugiere que cuando estamos a dieta vamos a pasar hambre casi irremediablemente. Tanto es así que, cuando intentamos perder peso y no pasamos hambre casi sentimos que algo no está funcionando bien.
Sin embargo, la realidad es que una dieta saludable y adecuada, que nos permita convertirla en un hábito y mantenerla a largo plazo, no nos hará pasar hambre. Al contrario, debería ayudarnos a sentirnos saciados. Dentro de este estilo de alimentación, picar entre horas está permitido, siempre que sepamos cómo hacerlo, los alimentos adecuados y las opciones que nos permitirán mantenernos saciados sin afectar a nuestro peso ni a nuestra salud.
Cómo picar bien entre horas
Lo más habitual es que picar entre horas signifique comer algo rápido en un horario en el que, habitualmente, no estamos en nuestras casas. Esto significa que solemos acudir a lo primero que encontramos. Acabamos comprando algo rápido en una tienda o en una máquina expendedora.
Quizás paramos a tomar algo en una cafetería y nos comemos la tapa que nos pongan o la galleta que acompañe al café. En definitiva, acabamos optando por opciones menos saludables que boicotean un poco la labor que hacemos en las otras comidas del día.
Lo principal que debemos tener en cuenta a la hora de picar bien es seguir más o menos las mismas indicaciones que en el resto de comidas: intentar alejarnos de los alimentos ultraprocesados tanto cómo podamos, optar por alimentos frescos, productos que hayamos cocinado nosotros en casa y que tengan grasas saludables y poco o ningún azúcar añadido.
Para ello podemos ayudarnos de frutas, frutos secos, encurtidos, yogures, infusiones, chocolate negro superior al 70%, cereales integrales como la avena, semillas e, incluso, legumbres como los garbanzos o las alubias. Supone un poco más de trabajo, ya que en algunos casos implica cocinar, pero merece la pena y nuestro peso y nuestra salud lo notarán.
Recetas para el picoteo
- Snack de garbanzos especiados: si lo que buscas es algo que puedas preparar rápido y picotear en cualquier sitio a cualquier hora, este snack es ideal. Se prepara de forma muy sencilla y si lo guardas en un recipiente hermético te pueden aguantar mucho tiempo. Llevándolos encima no volverás a pasar hambre entre horas.
- Barritas energérticas de dátiles y avena: las barritas energéticas son una opción muy socorrida cuanto tenemos hambre entre comidas. Por ello, qué mejor que hacerlas nosotros mismos y asegurarnos de que son saludables y nos aportan buenos nutrientes. Además, también podremos llevarlas encima y comerlas dónde queramos.
- Trufas de chocolate veganas: si os gusta el dulce y no podéis pasar sin él, esta es vuestra receta. Además, es apta para veganos. Lo ideal es no abusar de ellas, pero ocasionalmente son una buena opción para picar cuando nos aprieta el hambre.
- Palitos crujientes de zanahoria: estos palitos nos aportan un toque dulce, además del crujiente similar al de las patatas fritas. Las podemos sazonar con las especias que más nos gusten y es una forma muy sana de quitarnos el hormigueo en el estómago entre horas.
- Hummus: todos conocemos el hummus, a todos nos gusta el hummus. Se hace de manera muy sencilla, se puede guardar durante varios días, lo podemos elaborar con distintos sabores y, además, nos quita el gusanillo de dipear. Poco más se le puede pedir a una comida.
- Pipas de calabaza tostadas: la receta es bastante similar a los garbanzos especiados e, igual que ellos, podemos sazonarlos con las especias que queramos y llevarlos encima cuándo queramos.
- Tortitas de calabaza y avena: uno de mis tentempiés favoritos cuando estoy en casa y tengo tiempo es hacerme tortitas de avena. Esta receta les da un toque especial y añade un poquito más de dulzor a la receta tradicional.
- Polos de mango y plátano: llega el calor y a todos nos apetece un helado de vez en cuando. Con esta receta tan rica y fácil de hacer podemos consumir helado en casa sin culpa y cuidándonos.
- Crackers crujientes de semillas y avena: si para vosotros picar no es picar sin un poco de crujiente, los cracker son una opción excepcional. Aumentan nuestra masticación afectando directamente a la saciedad que sentimos.
- Bombones de zanahoria, avena y almendras: los bombones ya no están prohibidos y estos elaborados con alimentos saludables son la prueba más clara.
- Crema de cacahuetes: la crema de cacahuete es un alimento muy utilizado en algunos países. Sin embargo, es considerada como no recomendable por tener muchas grasas y azúcares. En realidad, si la elaboramos en casa y nos aseguramos de no incluir nada más que cacahuetes, estaremos elaborando un alimento muy adecuado para picar.
- Galleta de avena y frutos secos: frutos secos y avena para elaborar unas galletas deliciosas, saludables y llenas de proteína. Si hacemos deporte se trata de un alimento especialmente adecuado para consumir cuando nos entre el hambre.
- Snack de alubias: ideales para comer cuando estamos fuera de casa o tenemos prisa. Se elaboran de forma muy sencilla y rápida y las podemos guardar para consumir durante los siguientes días. Sacian mucho y nos quitan el gusanillo.
Imágenes | Vitónica, Directo al Paladar, Unsplash
